El título de “Técnico Superior en Formación para la movilidad segura y sostenible” ¿solución o problema?
El título de “Técnico Superior en Formación para la movilidad segura y sostenible” ¿solución o problema?
El factor humano en la movilidad segura: usuarios y profesionales.
El factor humano viene siendo el mayormente presente en los análisis de las causas de los accidentes de tráfico, bien como causa principal, bien compartiendo causalidad con vía o con vehículos. El núcleo central de los Planes de seguridad vial viene siendo el conductor del vehículo a motor quien con sus condiciones y capacidades es el más próximo recurso con posibilidades de generar o de evitar situaciones de riesgo en la vía pública. El factor humano sin embargo hay que extenderlo a aquellos otros usuarios implicados en situación de riesgo como pueden ser los ocupantes de los vehículos (no conductores), peatones, ciclistas y demás personas móviles sobre el entorno de las vías públicas susceptibles de estar implicados en las consecuencias de un accidente. Protagonistas relevantes del factor humano de la inseguridad vial son las víctimas de accidente y sus familiares (muertos, heridos o lesionados de distinta consideración), cuya problemática social, económica y familiar ha pasado a formar parte de las estrategias generales. Para llegar a incidir en los comportamientos de los conductores y demás usuarios se pueden utilizar preferentemente las campañas preventivas de mentalización y sensibilización de las personas diana como la obligada voz de los organismos responsables en los medios de mayor difusión, lo que ha venido siendo denominador común de Administraciones según los recursos que hayan podido destinar.
Pero hay acuerdo en aceptar que la fórmula de mayor efectividad es conseguir la introducción de la educación vial en toda la vida de las personas: escolar (infantil, juvenil, universitaria), preconductora, conductora, trabajadora y tercera edad. A fin de cuentas una educación permanente en todas las edades y todos los ámbitos de la vida. Los contenidos de la educación vial han sido dispersados entre diferentes profesionales de entre los cuales, han predominado en número los Policías Locales y también Policías de Carretera formados en las Escuelas de Policía (únicos recursos y gratuitos que se han podido disponer en muchas ocasiones) que efectúan sus sesiones en los centros correspondientes generalmente uniformados y dando la imagen del policía amigo, ocupando un espacio que, desde la vertiente educativa sería más acorde fuera desarrollado más por expertos en seguridad vial preventiva que por los profesionales de la seguridad vial conceptualmente represiva policial. Las autoridades educativas han venido contemplando sin embargo de manera positiva la colaboración policial en la medida en que se combina la enseñanza de la seguridad vial con la didáctica de la autoridad y la jerarquía.
Los profesionales de la movilidad segura: los formadores
El amplio campo del tráfico y de la seguridad, implica a diferentes profesionales que actúan de forma transversal desde sus respectivas especialidades, planteando paralelamente factores de concurrencia y no de exclusividad. La circulación de vehículos y personas en el marco de la movilidad general puede ser mucho más segura si se consigue combinar, equilibrar e integrar los beneficios de la aplicación de los avances tecnológicos de la ingeniería en un contexto necesariamente vinculado a la psicología que viene aportando metodologías para la selección, evaluación y rehabilitación de las personas que realizan actividades de riesgo. Una nueva Ley deberá contemplar el encaje de los especialistas en el factor humano en el nuevo modelo de tráfico y de la seguridad, bien sean titulados en psicología, ingeniería, medicina y otras especialidades universitarias relacionadas con la salud y/o la seguridad, o bien como aquellos otros profesionales que mantienen su contacto directo con los conductores o aspirantes a serlo.
Los profesionales de la formación vial son los especialistas designados para ejercer la docencia de formación vial en los centros de formación vial (autoescuelas). Tienen una función especialmente importante tanto en la preparación de las pruebas de aptitud para la obtención de los permisos o licencias de conducir, como para los cursos de recuperación de puntos y permisos que lleva más de 10 años de funcionamiento en España . Históricamente, los requisitos para ejercer de profesional de la formación viaria han venido exigiendo estar en posesión como mínimo del título de la ESO (Educación Secundaria Obligatoria) y del permiso de conducir. Ambas condiciones dan lugar a la obtención del certificado de aptitud de profesor/a de formación vial. Este certificado de aptitud es un certificado administrativo que expide la Dirección General de Tráfico (Ministerio del Interior del Estado) o en el caso de las Comunidades Autónomas, su homólogo. Ha sido una reivindicación de este colectivo promover otro tipo de formación reglada que dé lugar a la obtención de una titulación en este ámbito, ni por la vía educativa de la FP inicial del sector educativo ni por la vía de la formación para la ocupación del ámbito laboral. La única referencia obtenida en los últimos años ha sido una cualificación profesional denominada “Docencia de formación vial”, como paso previo a la creación de un Certificado de Profesionalidad.
La carrera profesional de los Profesores o Docentes de Formación Vial es la piedra filosofal de un nuevo proyecto en el que estén perfectamente concretadas las líneas de acceso a la profesión, sus niveles, su cualificación, las convalidaciones y las compatibilidades de tales estudios con las materias de otras formaciones profesionales con temáticas sobrepuestas, de manera que no existieran dudas sobre el encaje de los miles de profesores de formación vial en el esquema de formación profesional reglamentariamente establecido. La previsión se ha cumplido con la creación del Titulo de F.P. Formación Profesional de TECNICO SUPERIOR EN FORMACIÓN PARA LA MOVILIDAD SEGURA Y SOSTENIBLE trabajado entre el Ministerio de Educación y Formación Profesional y la DGT con 14 Módulos, 120 créditos y 2000 horas mediante Real Decreto. Con ello no solo se oficializa la profesión de los educadores viales sino que se abre el camino para que reglamentariamente los centros de formación vial (autoescuelas) puedan regular sus plantillas de trabajadores a los perfiles y exigencias de calidad que el proyecto requiere y pueda abrirse una segunda gran etapa de protagonismo con su incorporación al proceso de revisión obligatoria del permiso de conducir para comprobar las condiciones (conocimientos teóricos, habilidades en la conducción y actitudes en la conducción según currículum del conductor que revisa). Incluso se puede plantear que los centros de formación vial sean considerados empresas colaboradoras de la Administración y puedan facilitar a los Organismos responsables una calificación previa al examen de conducir, a la recuperación de puntos y a la revisión del permiso cuando en cada momento corresponda.
El artículo 7 del Real Decreto hace referencia expresa a que “las personas que obtienen el Título de Técnico Superior en Formación para la movilidad segura y sostenible, ejercen su actividad en pequeñas, mediana y grandes empresas dedicadas a la formación de conductores para la obtención de las autorizaciones administrativas para conducir, y en general, a la formación para la seguridad vial. También podrán ejercer funciones relacionadas con la educación vial, la seguridad laboral vial y la movilidad segura y sostenible en entidades públicas y privadas, en las siguientes ocupaciones
a) Profesor de formación vial.
b) Director de escuelas de conductores.
c) Formador de cursos de sensibilización y reeducación vial.
d) Formador de cursos de mercancías peligrosas.
e) Director de centros de formación de mercancías peligrosas.
f) Educador en programas o actividades de educación vial en centros educativos, empresas, administraciones de ámbito estatal, autonómico o local.
g) Asesor de seguridad vial laboral en entidades públicas y privadas.
h) Asesor en planes de movilidad de entidades públicas y privadas.
i) Docente de seguridad vial.
j) Monitor de cursos de conducción segura.