La jerarquización del riesgo químico como herramienta de decisión: experiencias prácticas

Los métodos cualitativos de evaluación del riesgo químico constituyen una herramienta de trabajo que, de una forma sistematizada, permiten establecer las prioridades de acción y evaluación, en la estimación inicial del riesgo químico. De entre estas metodologías, la “Metodología simplificada del riesgo químico” del INRS propone que una vez se disponga de un inventario de los productos químicos, se proceda a la jerarquización del riesgo químico. En esta etapa se pretende clasificar el riesgo a partir de la estimación del riesgo potencial, de forma que objetivamente, puedan establecerse las prioridades de evaluación y de acción. En este estudio se presentan los resultados obtenidos en la etapa de jerarquización del riesgo químico, en diferentes trabajos realizados en los sectores: químico, farmacéutico, energético, de la salud pública y de investigación, con el fin de exponer la experiencia práctica de la aplicación de esta sistemática de priorización.
Palabras Clave: 
Métodos Cualitativos; Riesgo Químico; Jerarquización; ORP Conference
Autor principal: 
EVA
DALMAU SILLA
SGS Tecnos
España

Introducción

El objetivo de la evaluación del riesgo químico en un puesto de trabajo es determinar si la exposición a los contaminantes químicos que se manipulan o que pueden estar presentes en el ambiente de trabajo es aceptable y en caso contrario establecer las medidas de prevención y protección necesarias. Sin embargo, la evaluación del riesgo químico puede ser compleja en los puestos de trabajo de aquellos sectores en los que se manipulan un elevado número de productos, donde la manipulación de los productos químicos viene condicionada por la demanda del producto o servicio que se ofrece, por ejemplo trabajo en planta química por lotes, trabajos en laboratorios de investigación o análisis, etc., y donde es posible la existencia de múltiples escenarios de exposición. Por ello, en la práctica es necesario disponer de un instrumento de trabajo que permita realizar una estimación inicial del riesgo químico higiénico en su globalidad para poder seleccionar el conjunto de situaciones más preocupantes y que requerirán un estudio de evaluación más detallado.

Los métodos cualitativos de evaluación del riesgo químico son una herramienta de trabajo complementaria a la evaluación cuantitativa que, de una forma sistematizada, permiten establecer las prioridades de acción y evaluación, en la estimación inicial del riesgo químico. Entre ellos se destaca La “Metodología simplificada del riesgo químico” del Institut National de Recherche et de Sécurité (INRS) de Francia, por ser uno de los métodos simplificados más completos ya que tiene en cuenta un mayor número de parámetros en comparación con otros métodos cualitativos. Esta metodología propone que una vez se disponga de un inventario de los productos químicos, se proceda a la jerarquización del riesgo. En esta etapa se clasifica el riesgo químico a partir de la estimación del riesgo potencial, de forma que objetivamente, pueden establecerse las prioridades de evaluación y de acción posteriores.

La jerarquización es una etapa sencilla basada en variables fáciles de obtener y que mediante un procedimiento de cálculo simple permite obtener una puntuación del riesgo potencial para cada caso. Sin embargo, requiere un esfuerzo importante de recopilación de información, tanto de los productos químicos presentes, como de las cantidades y frecuencia de utilización de cada uno de ellos. Y por ello, debido al gran volumen de datos que pueden llegarse a tratar en esta etapa, resulta de gran utilidad disponer de una herramienta informática de cálculo. Así mismo, iniciado este proceso conviene mantener y actualizar toda esta información con el fin de dinamizar el proceso de evaluación de riesgos.

Durante años, SGS ha realizado diferentes trabajos de gestión integral del riesgo químico higiénico, en diferentes sectores, iniciando el análisis mediante la jerarquización del riesgo potencial. Para la elaboración de este estudio de casos, se han seleccionado 12 de los trabajos de campo realizados por SGS, los cuáles agrupan una representación del conjunto de sectores estudiados.

Metodología

El método “Evaluación simplificada del Riesgo Químico”, desarrollado por el Institut National de Recherche et de Sécurité (INRS), en colaboración con el Centre National de Protection et de Prévention (CNPP), se encuentra publicado en la Nota Documental ND 2233-200-05 [1]. La jerarquización del riesgo potencial basada en esta metodología, se realiza a partir de diferentes variables como se muestra en la figura 1. Por un lado, el peligro, asociado a cada agente químico, y por otro su exposición potencial determinada a partir de las cantidades y la frecuencia de utilización de cada agente.

Figura 1. Esquema de la jerarquización del riesgo potencial.

El método permite en función de estas variables asignar una puntuación del riesgo potencial. Como se ha comentado anteriormente, la complejidad de esta etapa reside, principalmente, en el elevado volumen de datos a procesar en algunos casos. En todos los estudios presentados, se ha utilizado una herramienta informática desarrollada por SGS que permite agilizar el proceso de cálculo y ordenar adecuadamente los resultados.

La mecánica de cálculo establece que las puntuaciones obtenidas para los diferentes agentes químicos se pueden ordenar en orden decreciente y así establecer el orden de las prioridades de actuación. Además, una vez ordenados los agentes químicos estudiados, a partir de la puntuación del riesgo potencial individual de cada uno y el riesgo potencial total, puede calcularse el porcentaje del riesgo potencial que supone cada caso. De forma que en el listado ordenado que se obtenga de la jerarquización, pueden sumarse los porcentajes parciales obtenidos en cada caso y calcular el porcentaje del riesgo potencial acumulado que suponen diferentes agentes químicos en su conjunto. Esta presentación de los resultados permite visualizar de una forma rápida donde se concentra principalmente el riesgo y los agentes químicos que en función de su peligrosidad y uso en cada empresa merecen una evaluación pormenorizada.

Estudio de casos

Alcance del estudio

En este trabajo se presentan y analizan los resultados obtenidos en la etapa de jerarquización del riesgo químico higiénico en 12 estudios de campo, seleccionados de la experiencia profesional de SGS, que engloban diferentes sectores (químico, energético, farmacéutico, servicios, docencia e investigación y sanitario). En la tabla 1 se presentan las características del conjunto de los trabajos seleccionados para el estudio de casos.

 

Sector

Área

Agentes químicos

Estudio 1

Energético

Proceso

64

Estudio 2

Energético

Proceso

32

Estudio 3

Servicios

Laboratorio

371

Estudio 4

Químico

Proceso

224

Estudio 5

Farmacéutico

Laboratorio

72

Estudio 6

Docencia/Investigación

Laboratorio

49

Estudio 7

Químico

Proceso

576

Estudio 8

Químico

Proceso

280

Estudio 9

Docencia/Investigación

Laboratorio

59

Estudio 10

Docencia/Investigación

Laboratorio

80

Estudio 11

Sanitario

Laboratorio

13

Estudio 12

Sanitario

Laboratorio

63

Tabla 1. Estudio de casos.

Se observa que en algunos estudios el número de contaminantes presentes en los lugares de trabajo es elevado (estudios 3, 4, 7 y 8). Particularmente, en estos casos resulta de gran utilidad la etapa de jerarquización ya que estudiar y tomar decisiones sobre que agentes y tareas merecen un estudio más detallado es sumamente complicado debido al elevado número de productos involucrados.

Presentación de resultados de cada estudio

Para cada uno de estos estudios se ha procedido a calcular la puntuación asociada al riesgo potencial de cada uno de los agentes químicos presentes en los lugares de trabajo. A continuación, los resultados obtenidos en la jerarquización se han ordenado en orden decreciente en función de su puntuación, tal y como como se indica en la metodología. Esta forma de presentación, además de establecer las prioridades de actuación, facilita el cálculo del riesgo potencial acumulado para un conjunto de contaminantes y permite visualizar de forma rápida aquellos agentes químicos que contribuyen principalmente al riesgo higiénico de los trabajadores expuestos en cada área, empresa o institución.

A modo de ejemplo, en la tabla 2 se muestra esta mecánica de cálculo y de presentación de resultados de uno de los trabajos que integran el estudio de casos (Estudio 6). En este estudio se observa que el riesgo se encuentra muy focalizado en 5 productos del total de 49 estudiados. Estos 5 productos, con prioridad alta, suponen el 91,7% del riesgo potencial acumulado. Si a ellos se suman los 10 productos con prioridad media, el riesgo potencial acumulado alcanza casi el 100%. Así, en base a este “mapa” de riesgo puede reducirse el estudio de evaluación posterior simplemente a 5 ó 15 productos, en función del criterio técnico adoptado, y puede prescindirse del resto de agentes químicos cuya aportación al riesgo es mínima dentro de su conjunto.

Agente químico

Clase peligro

Clase cantidad

Clase frecuencia

Clase expos.

Puntuación riesgo potencial

Riesgo potencial

Riesgo potencial acumulado

Producto 26

4

5

3

5

100.000

57,3%

57,3%

Producto 27

4

4

3

4

30.000

17,2%

74,5%

Producto 48

5

1

1

1

10.000

5,7%

80,2%

Producto 23

4

3

3

3

10.000

5,7%

85,9%

Producto 28

3

5

2

5

10.000

5,7%

91,7%

Producto 46

4

2

2

2

3.000

1,7%

93,4%

Producto 30

4

2

3

2

3.000

1,7%

95,1%

Producto 25

3

4

2

4

3.000

1,7%

96,8%

Producto 37

4

1

1

1

1.000

0,6%

97,4%

Producto 31

4

1

2

1

1.000

0,6%

98,0%

Producto 33

4

1

3

1

1.000

0,6%

98,5%

Producto 34

4

1

3

1

1.000

0,6%

99,1%

Producto 24

3

3

3

3

1.000

0,6%

99,7%

Producto 22

3

1

3

1

100

0,1%

99,7%

Producto 35

3

1

1

1

100

0,1%

99,8%

Producto 21

2

2

3

2

30

0,0%

99,8%

Producto 29

1

5

1

4

30

0,0%

99,8%

Producto 1

2

1

3

1

10

0,0%

99,8%

Producto 2

2

1

3

1

10

0,0%

99,8%

Producto 3

2

1

3

1

10

0,0%

99,8%

Producto 4

2

1

3

1

10

0,0%

99,8%

Producto 5

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 6

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 7

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 8

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 9

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 10

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 11

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 12

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 13

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 14

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 15

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 16

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 17

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 18

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 19

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 20

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 32

2

1

3

1

10

0,0%

99,9%

Producto 36

2

1

1

1

10

0,0%

99,9%

Producto 38

2

1

1

1

10

0,0%

100,0%

Producto 39

2

1

2

1

10

0,0%

100,0%

Producto 40

2

1

2

1

10

0,0%

100,0%

Producto 41

2

1

1

1

10

0,0%

100,0%

Producto 42

2

1

3

1

10

0,0%

100,0%

Producto 43

2

1

2

1

10

0,0%

100,0%

Producto 45

2

1

1

1

10

0,0%

100,0%

Producto 47

2

1

2

1

10

0,0%

100,0%

Producto 49

2

1

3

1

10

0,0%

100,0%

Producto 44

1

1

2

1

1

0,0%

100,0%

Tabla 2. Ejemplo de presentación ordenada del riesgo potencial.

Resultados y discusión del estudio de casos

Los resultados de la etapa de jerarquización de los 12 estudios presentados se muestran en la tabla 3.

     

Prioridad

 
     

Alta

Media

Baja

 

Estudios

Sector

Área

nºAQ

nºAQ

nºAQ

Total AQ

Estudio 1

Energético

Proceso

9

26

29

64

Estudio 2

Energético

Proceso

8

21

3

32

Estudio 3

Servicios

Laboratorio

40

163

168

371

Estudio 4

Químico

Proceso

15

92

117

224

Estudio 5

Farmacéutico

Laboratorio

18

41

13

72

Estudio 6

Docencia/Investigación

Laboratorio

5

10

34

49

Estudio 7

Químico

Proceso

8

260

308

576

Estudio 8

Químico

Proceso

0

80

200

280

Estudio 9

Docencia/Investigación

Laboratorio

4

28

27

59

Estudio 10

Docencia/Investigación

Laboratorio

5

27

48

80

Estudio 11

Sanitario

Laboratorio

2

8

13

13

Estudio 12

Sanitario

Laboratorio

3

21

39

63

Tabla 3. Resultados de la jerarquización del estudio de casos. AQ: agente químico.

Se observa que la prioridad alta se concentra, en general, en un reducido número de agentes químicos del total de los estudiados en cada caso. Un caso particular es el resultado obtenido en el Estudio 8, donde ninguno de los agentes estudiados presentó prioridad alta. Este estudio estaba compuesto por un elevado número de sustancias de peligrosidad intrínseca moderada o baja y por ello en la jerarquización, el riesgo potencial se repartió sólo entre la prioridad media y baja. En el resto de casos la prioridad media y baja se distribuyen de forma desigual, con casos que predomina claramente la prioridad media como los Estudios 2 y 5, casos que ambas prioridades alcanzan casi la paridad, como los Estudios 3 y 9, y casos en que predomina la prioridad baja, como los Estudios 6 y 8.

En la figura 2 se representa el riesgo potencial acumulado en cada uno de los casos estudiados. La franja roja corresponde al conjunto de agentes químicos con prioridad alta, las franjas naranjas y amarillas, corresponden al conjunto de escenarios con prioridad media y la franja blanca al conjunto de agentes con prioridad baja. La prioridad media, debido a su extensión en algunos casos se divide en las 4 puntuaciones posibles: media 3000 (naranja oscuro), media 1000 (naranja claro), media 300 (amarillo oscuro) y media 100 (amarillo claro), con el fin de visualizar mejor la distribución de la prioridad intermedia.

De una forma práctica, se establece que puede prescindirse, en la mayoría de casos, de los agentes químicos que en su conjunto signifiquen apenas un 20% del riesgo potencial acumulado, salvo los que estén regulados por una legislación específica [2]. Así pues, en base a esta premisa, resulta interesante el estudio del conjunto de casos que se sitúan por encima del 80% del riesgo potencial acumulado. Del análisis realizado, 7 estudios {1, 2, 3, 5, 6, 10 y 12} alcanzan este valor sólo con el conjunto de agentes químicos con prioridad alta. El resto de casos, el 80% del riesgo se alcanza si además del conjunto de agentes con prioridad alta se incluyen los de prioridad media con puntuación igual a 3000, estudios {4, 9 y 11} y los que se incluyen los de prioridad media con puntuación igual a 3000 y 1000, Estudio 7.

Prioridad

Riesgo potencial acumulado

6,2

Estudio

4,3
31,5

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

Estudio

                         

Figura 2. Representación del riesgo potencial acumulado en el estudio de casos.

Un caso particular y claramente diferente al resto es el Estudio 8, donde, como se ha comentado anteriormente, el riesgo no se concentra principalmente en pocos productos, si no que se distribuye ampliamente en las diferentes franjas que componen la prioridad media. En este Estudio, además, el conjunto de agentes con prioridad baja (6,2% de riesgo), supone una franja claramente visible (de color blanco), situación que es casi imperceptible en la mayoría del resto de los estudios realizados.

Así pues, a partir de este análisis, puede deducirse que si los estudios de evaluación posterior se centran en los agentes con prioridad alta o bien prioridad alta y media-alta se cubre, generalmente, un alto porcentaje del riesgo total. En todo caso, pueden existir excepciones y para cada caso deberá realizarse un análisis de los resultados obtenidos en la jerarquización y establecer las prioridades acordes a cada situación a juicio técnico.

Por otro lado, también resulta interesante realizar un análisis de cómo se distribuye el riesgo potencial acumulado respecto al conjunto de agentes químicos. En la tabla 4 se muestran para cada estudio, el número de agentes químicos (nºAQ) que determinan el 80, 85, 90 y 95 % del riesgo potencial acumulado (RPA).

     

RPA 80%

RPA 85%

RPA 90%

RPA 95%

 

Estudios

Sector

Área

nºAQ

nºAQ

nºAQ

nºAQ

Total AQ

Estudio 1

Energético

Proceso

8

9

13

17

64

Estudio 2

Energético

Proceso

4

5

7

8

32

Estudio 3

Servicios

Laboratorio

27

33

40

73

371

Estudio 4

Químico

Proceso

17

23

29

42

224

Estudio 5

Farmacéutico

Laboratorio

10

12

15

18

72

Estudio 6

Docencia/Investigación

Laboratorio

3

4

5

7

49

Estudio 7

Químico

Proceso

48

61

79

171

576

Estudio 8

Químico

Proceso

52

62

73

89

280

Estudio 9

Docencia/Investigación

Laboratorio

6

8

12

16

59

Estudio 10

Docencia/Investigación

Laboratorio

5

6

9

15

80

Estudio 11

Sanitario

Laboratorio

5

5

6

7

13

Estudio 12

Sanitario

Laboratorio

2

2

3

7

63

Tabla 4. Número de agentes químicos (AQ) incluidos en diferentes distribuciones del riesgo potencial acumulado (RPA).

Dado que cada estudio consta de un número diferente de agentes químicos resulta difícil hacer una comparación entre ellos. Por ello, en la tabla 5 se presentan estos mismos resultados normalizados en la misma escala (es decir, expresados todos ellos con el número de agentes químicos correspondientes a cada distribución del riesgo potencial acumulado para un número total de 100 agentes en todos los casos). De esta forma puede compararse los resultados obtenidos en todos los estudios. Evidentemente, como era de esperar, existe una variabilidad importante en los resultados, debido a que el mapa de riesgo puede ser muy diferente en función de la peligrosidad de los agentes químicos empleados y su posible exposición. Sin embargo, si se analizan los datos de la tabla normalizada, se observa que con un número relativamente bajo respecto el total de agentes químicos, exceptuando el Estudio 11, se puede alcanzar un porcentaje considerablemente alto (> 80%) del riesgo potencial acumulado.

     

RPA 80%

RPA 85%

RPA 90%

RPA 95%

 

Estudios

Sector

Área

nºAQ

nºAQ

nºAQ

nºAQ

Total AQ

Estudio 1

Energético

Proceso

13

14

20

27

100

Estudio 2

Energético

Proceso

13

16

22

25

100

Estudio 3

Servicios

Laboratorio

7

9

11

20

100

Estudio 4

Químico

Proceso

8

10

13

19

100

Estudio 5

Farmacéutico

Laboratorio

14

17

21

25

100

Estudio 6

Docencia/Investigación

Laboratorio

6

8

10

14

100

Estudio 7

Químico

Proceso

8

11

14

30

100

Estudio 8

Químico

Proceso

19

22

26

32

100

Estudio 9

Docencia/Investigación

Laboratorio

10

14

20

27

100

Estudio 10

Docencia/Investigación

Laboratorio

6

8

11

19

100

Estudio 11

Sanitario

Laboratorio

38

38

46

54

100

Estudio 12

Sanitario

Laboratorio

3

3

5

11

100

   

PROMEDIO

12

14

18

25

 

Tabla 5. Número de agentes químicos (AQ) incluidos en diferentes distribuciones del riesgo potencial (RP) acumulado en base normalizada (nº total de agentes químicos igual a 100).

De los estudios considerados en este trabajo, se observa comparativamente que los extremos se sitúan en los Estudios 11 y 12. En el primer caso el riesgo se distribuye en un número elevado de agentes químicos (entre 38 y 54 de 100) y en el segundo en un número reducido (entre 3 y 11 de 100). El resto de casos se sitúan entre estos extremos. No se observan diferencias significativas entre los resultados obtenidos en procesos y en los laboratorios. Si, en base a este estudio de casos, se realiza el promedio de los agentes que se incluyen en cada una de las distribuciones del riesgo potencial acumulado (ver tabla 5) se obtiene que el 80% del riesgo se acumula de promedio en un 12% del total de agentes estudiados mientras que el porcentaje de agentes químicos, de promedio, se amplía al 25% para alcanzar el 95% del riesgo potencial acumulado. Así, salvando las diferencias debido a la variabilidad de los resultados en los casos estudiados, puede concluirse que la realización de la etapa de jerarquización constituye una buena herramienta de trabajo porque permite planificar y centrar los estudios de evaluación posteriores en los riesgos más importantes, de tal forma, que desde un punto de vista práctico, en éstos puede prescindirse de un alto porcentaje de los agentes químicos iniciales los cuáles contribuyen en menor medida al riesgo potencial.

Conclusiones

La realización de la etapa de jerarquización resulta de gran utilidad, ya que en ella se ordena y clasifica el riesgo a partir de la estimación del riesgo potencial, de forma que objetivamente, pueden establecerse las prioridades de evaluación y de acción posteriores. Con ello, se consigue simplificar el laborioso proceso de evaluación y centrar las fases de evaluación posteriores en los riesgos para la salud más significativos en cada caso.

En cada situación deberá realizarse un análisis de los resultados obtenidos en la jerarquización y establecer las prioridades acordes en cada caso a juicio técnico, por ello, a pesar que los métodos simplificados son sencillos de cálculo la experiencia profesional en el campo de la Higiene Industrial resulta imprescindible.

Finalmente, del análisis de la jerarquización de los 12 casos estudiados, se observa que cada uno presenta su propia distribución del riesgo potencial, existiendo casos con una marcada distribución del riesgo potencial de prioridad alta y casos en los que el riesgo se distribuye más uniformemente entre la banda media y alta. No obstante, considerando los riesgos con prioridad alta o bien prioridad alta y media-alta se abarca, generalmente, un alto porcentaje del riesgo potencial acumulado. Particularmente, en este trabajo concreto, se obtiene de promedio que el 25% de los agentes químicos estudiados inicialmente constituyen el 95% del riesgo potencial acumulado. Consecuentemente, la selección de estos escenarios prioritarios reduce significativamente el número de agentes químicos objeto de estudio en la fase posterior de evaluación detallada.

Bibliografía

  • 1. Vincent, R.; Bonthoux, F.; Mallet, G; Iparraguirre, J.F; Rio, S (2005) Méthodologie d’évaluation simplifiée du risque chimique: un outil d’aide à la décision.  INRS, Hygiène et sécurité du travail –Cahiers de notes documentaires, ND 2233, Nº 200.
  • 2. Sánchez Cabo, M.T.; Sousa Rodríguez, M.E (Coordinación). (2010) Riesgo Químico. Sistemática para la Evaluación Higiénica. ISBN: 9788474257861.
  • 3. Real Decreto 374/2001, de 6 de abril sobre protección de la salud y seguridad de los trabajadores contra los riesgos relacionados con los agentes químicos durante el trabajo. BOE nº 104 de 1 de mayo de 2001.
  • 4. Real Decreto 363/1995, de 10 de marzo, por el que se aprueba el Reglamento sobre notificación de sustancias nuevas y clasificación, envasado y etiquetado de sustancias peligrosas. BOE nº 133 de 5 de junio de 1995.
  • 5. Real Decreto 255/2003, de 28 de febrero, por el que se aprueba el Reglamento sobre clasificación, envasado y etiquetado de preparados peligrosos. BOE nº 54 de 4 de marzo de 2003.
  • 6. Reglamento (CE) nº 1272/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16dediciembre de2008, sobre clasificación, etiquetado y envasado de sustancias y mezclas, y por el que se modifican y derogan las Directivas 67/548/CEE y 1999/45/CE y se modifica el Reglamento (CE)nº1907/2006.