Buenas prácticas preventivas en las empresas
Parece incuestionable que una buena gestión empresarial implica seguir unas buenas prácticas preventivas, que permitan no sólo garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, mejorando con ello su calidad de vida, sino que además se promocione la salud, en el sentido de convertir los entornos de trabajo en lugares saludables. Implantar y desarrollar una adecuada gestión preventiva, al igual que cualquier otra materia de gestión empresarial en materia de prevención, requiere el compromiso y el sólido liderazgo de la Dirección y de la cadena de mando.