Las competencias emocionales, motor de cambio en nuestra realidad digital

Durante estos días hemos escuchado y leído mucho sobre el teletrabajo, ese que nos ha permitido a muchos de nosotros seguir más o menos con nuestra “vida profesional”. Una vida profesional que hemos tenido que adaptar a nuestra nueva situación, así como también ha tenido que adaptarse nuestra organización, nuestros equipos y nuestros colaboradores.

Y tras todos estos cambios, de esta nueva manera de trabajar basada especialmente en la tecnología como herramienta de cooperación y de relación, las competencias emocionales a la hora de trabajar en equipo se han vuelto extremadamente importantes.

Ha sido una reflexión por mi parte, después de esta semana haber tenido que realizar todas y cada una de mis reuniones de forma virtual, mediante varias de las herramientas que hay en el mercado: Skype, Hangouts, Meet, etc.

¿Trabajamos igual en equipo cuando las relaciones son de forma presencial que cuando lo hacemos en remoto? ¿Hemos de tener más en cuenta todas y cada una de estas competencias emocionales cuando nos relacionamos con los demás a distancia?

Hay muchas clasificaciones respecto a las competencias emocionales, pero todas estas clasificaciones coinciden en que estas cinco forman parte:

Autoconciencia emocional, Autodominio emocional, Automotivación, Empatía y Habilidades sociales.

1. Autoconciencia emocional, yo la entiendo como conocer nuestras emociones e identificar en que estado emocional nos encontramos. En esta nueva situación es importante para nosotros identificar cómo nos encontramos en estos momentos, qué sentimos, cómo lo vivimos, qué nos preocupa, en qué orden nos preocupa, todo a la vez.
2. Autodominio emocional, lo entendemos como ser capaces de controlar nuestros impulsos y responder a situaciones complejas más allá de las reacciones a corto plazo. Esta nueva situación nos afecta a la hora de relacionarnos con nuestros colaboradores y al definir nuevos objetivos grupales a largo plazo.
3. Automotivación, se refiere a la capacidad de cada persona para establecer objetivos, ilusionarse y ofrecer tiempo, recursos y energía. Situación que a priori en estas circunstancias de #yomequedoencasa y #teletrabajo es propicia para poder dedicarle el tiempo y energía a aquellos aprendizajes que normalmente no podemos, o a ampliar y mejorar ese reciclaje en nuestros conocimientos de nuevas herramientas, mejorar nuestros idiomas, etc.

4. Empatía, capacidad de ser consciente de los sentimientos, necesidades y preocupaciones de los demás. En esta competencia damos un salto más, no es el “YO soy importante”, sino el “Nosotros somos importantes”, por lo que a la hora de relacionarnos con nuestro equipo en esta nueva realidad hemos de ser conscientes que es ahora cuando debemos tener más en cuenta a los demás. Esta nueva situación nos da la oportunidad no sólo de poder teletrabajar, de reciclarnos, de aprender nuevos conocimientos, sino también de aprender una nueva manera de relacionarnos entre nosotros. Todos somos nuevos en esto, o la mayoría lo somos. No estamos acostumbrados a relacionarnos a distancia, en remoto, no estar cerca de nuestros interlocutores, ver cómo se comporta de forma directa, por lo que es nuestra gran oportunidad de aprender, de poder hacer mejor las cosas, pensar en los otros, preocuparnos y ponernos en los zapatos del otro. Tengámoslo en cuenta cuando nos relacionamos en la distancia con los demás.

5. Habilidad social, es la capacidad de influir, comunicar, colaborar, resolver conflictos y trabajar en equipo. El ser humano es un ser social, necesita relacionarse, estar en contacto con otros seres humanos que nos aporten mejora, socialización, capacidad para cuestionarnos las cosas, etc. Desde mi punto de vista esta competencia junto con la empatía es la competencia emocional que más veremos afectada en esta nueva situación que nos ha tocado vivir.

Parece incluso contradictorio que donde la tecnología ha sido la que en estos momentos a podido ofrecernos muchas salidas: seguir trabajando, relacionarnos, aprender, informarnos del día a día, distraernos, etc., sean las competencias emocionales las que van a dirigir esos cambios.

Nuestros antiguos paradigmas a la hora de conocer y relacionarnos van a cambiar por completo, a partir de estos días las empresas han entendido que es muy importante estar digitalizadas, trabajar en red, estar conectados y cooperando sino no podremos avanzar, pero serán las Competencias Emocionales las que dirijan estos grandes cambios.