Cultura de prevención de riesgos laborales

¿Qué influye más en los comportamientos de las personas: lo que se dice que hacemos, o lo que hacemos en realidad?

El interés por la cultura organizacional ha ido aumentando considerablemente a partir de la década de los años ochenta y cada vez más encontramos autores que defienden el conocimiento de la cultura organizacional como forma de actuación estratégica y eficiente dentro de la organización. En 1987 se empieza a utilizar el término de cultura preventiva; en el informe de la agencia nuclear de la OCDE tras el accidente de Chernobil cuando se emplea este término para hacer referencia a la cultura en que opera la prevención. De manera paulatina empiezan a desarrollarse estudios en torno a la cultura preventiva, y a encontrar ésta su sitio dentro del área de la Seguridad y Salud.

La comprensión e identificación de la cultura preventiva en la empresa es, por tanto, algo básico para actuar de manera eficiente, segura y eficaz. Un estudio de cultura permite comprender las relaciones de poder, las reglas no escritas, lo que es percibido como verdad, etc. En este sentido, aclara una serie de comportamientos aparentemente ininteligibles e inconexos, permitiendo un planeamiento de la actuación preventiva coherente con la realidad de la organización.

Centrándonos en los últimos años, proliferan de manera significativa los trabajos desarrollados por expertos en  cultura preventiva de las organizaciones, lo que permite comparar los distintos enfoques que cada uno adopta y resaltar los puntos comunes a todos ellos, así como extraer conclusiones sobre cuál es el estado actual del arte en el campo de la cultura preventiva. El principal resultado de esta comparación de enfoques es que no existe un consenso general a la hora de definir este constructo, se observan confusiones a la hora de definir cultura y clima, los indicadores característicos de cada uno de ellos, la relación cierta entre cultura / clima y comportamiento seguro, su medición e interpretación. Sin embargo, se pueden aportar elementos positivos y no sólo limitaciones en esta área del conocimiento: la revisión de los estudios realizados muestra que los autores están de acuerdo en que existe una relación positiva entre cultura preventiva y seguridad.

Por otra parte, cabe resaltar también un elemento fundamental en el concepto de cultura preventiva. Nos referimos a la constitución de una cultura fuerte y su nivel de formalización en la organización, donde ésta pasa a un segundo plano, pues una cultura fuerte no depende de documentación escrita para influir sobre sus miembros, o para que ellos sepan lo que se espera de ellos. Hay una tradición fuerte y unos flujos de información que llegan a todos los niveles, y el o los líderes se han encargado por su parte de impregnar determinados valores y estilos en la organización, por medio de una serie de comportamientos consistentes en el tiempo.

Para finalizar, quisiéramos destacar los siguientes aspectos para el desarrollo futuro en este campo:

• La necesidad de aumentar la rigurosidad conceptual, metodológica y técnica en el abordaje de esta temática.
• La importancia que debe darse al estudio de las prácticas culturales en la organización, desplegadas desde la Dirección hasta los empleados.
• Es fundamental estar constantemente cuestionándonos la mejora de la gestión (pensar en que tenemos un modelo de cultura preventiva perfecta no sería realmente bueno, más bien deberíamos preguntarnos qué nos hace pensar que nosotros nunca vamos a sufrir un accidente): es necesaria la continua revisión, puesto que son continuos los cambios que se dan en las organizaciones y en su entorno.
• El desafío de construir herramientas eficaces para la exploración y descripción de cada cultura, que ayuden al desarrollo de la seguridad y la salud de los trabajadores.
• La búsqueda continua de la incorporación de la prevención en la gestión empresarial: las actuaciones preventivas deben poder integrarse en el sistema de gestión de la empresa, y deben formar parte intrínseca de los procedimientos de trabajo en cada uno de los niveles jerárquicos.
• La seguridad y salud en el trabajo como resultado directo de una organización del trabajo que permita asegurar unas condiciones de trabajo adecuadas.

En el Congreso ORP 2008 de La Coruña, tendremos la oportunidad de compartir con tres destacados expertos investigadores en este tema: Frank W. Guldenmund (Delft University of Technology), Gudela Grote (ETH Zürich), y Dov Zohar (Technion Institute, Israel).