Crónicas marcianas
Crónicas marcianas
Al igual que el Gran Cañón del Colorado, los valles de Nanedi serpentean a través de la superficie de Marte (ver imagen, a la izquierda una parte del Gran Cañón, a la derecha los valles de Nanedi, en Marte), lo que sugiere que alguna vez el agua líquida cruzó ese paisaje.
Desde hace más de treinta años los esfuerzos de los científicos para producir modelos climáticos que condujesen a temperaturas lo suficientemente cálidas para permitir la existencia de agua líquida en la superficie de Marte y explicaran la existencia de valles similares al Gran Cañón habían fracasado, al incluir sólo atmósferas con dióxido de carbono y vapor de agua.
Pero la presencia de hidrógeno molecular, además de dióxido de carbono y agua, podría haber creado un efecto invernadero en Marte hace 3.800 millones años lo que hubiera conducido a temperaturas lo suficientemente altas como para hacer posible la existencia de agua líquida.
Así lo afirman los investigadores Ramsés M. Ramírez, James Kasting y Evan Pugh, profesores de Geología en la Universidad Estatal de Pensilvania, en un artículo publicado en la revista Nature Geoscience el 24 de noviembre.
Los investigadores han mostrado que el efecto invernadero producido por una atmósfera que además de dióxido de carbono y vapor de agua contuviese hidrógeno podría explicar las formaciones geológicas observadas.
El modelo desarrollado demuestra que es posible que los gases procedentes de la actividad volcánica hubieran dado lugar a cantidades suficientes de dióxido de carbono e hidrógeno como para generar un efecto invernadero capaz de aumentar la temperatura hasta permitir la existencia de ríos que diesen lugar a los valles que observamos actualmente. Aunque hace 3.800 millones de años el sol era un 30% menos brillante que en la actualidad, la presencia de grandes cantidades de hidrógeno en la atmósfera marciana habría sido capaz de lograr el efecto invernadero que el agua y el dióxido de carbono por sí solos no logran explicar.
Fuente: Nanowerk