El metaverso es un camelo, o no (y los NFT también). Fantasías, realidades y expectativas

El metaverso es un camelo, o no (y los NFT también). Fantasías, realidades y expectativas

Para abordar el fenómeno del metaverso, es conveniente hacerlo desde una triple perspectiva, tecnológica, de negocio y legal
18 Junio 2022

Nueva York exhibe la arquitectura de Gaudí 'viva' gracias al metaverso. (EFE/Sarah Yáñez-Richards)

No hay día sin noticia sobre el metaversoparece que no se agotan las historias, y aunque algunas dan risa, otras hacen pensar.

En un mundo de memoria débil, conviene recordar los fiascos sufridos alrededor de la tecnología: La supuesta nueva economía de las 'puntocom', el apocalipsis del Y2K y los negocios basados en 'apps'. Todos estos fueron fenómenos de posibles negocios de base tecnológica, donde las expectativas de muchos se frustraron y los ahorros de otros tantos desaparecieron. Y algunas cosas que se leen y escuchan suenan a lo mismo.

Esto no es escepticismo, o tal vez sí, pero en cualquier caso es una llamada a la prudencia. Vivimos una situación económica y social bien diferente de aquella en la que se produjeron aquellos 'timos tecnológicos'. La economía ahora sí es digital y la sociedad navega a bordo de dispositivos móviles. Por tanto, ahora como entonces, salir triunfante o cosechar un fracaso estrepitoso depende de hacer una aproximación racional antes que emocional.

Para abordar el fenómeno del metaverso, es conveniente hacerlo desde una triple perspectiva, tecnológica, de negocio y legal. El entorno tecnológico nos indica qué es posible ahora y qué está pendiente, y esto determina lo que se puede y podrá hacer desde un punto de vista de negocio. Y el marco legal debe revisarse, aunque solo sea para determinar si necesitamos un cambio radical, solo una adaptación o dejarlo como está.

El entorno tecnológico

Desde un punto de vista tecnológico, el metaverso, tal y como lo definió Matthew Ball —“Una serie de entornos virtuales persistentes interconectados renderizados en 3D que simulan una realidad”—, está todavía lejos. 'Ready player one' sería una visualización de ello.

Ese entorno ideal tiene unos requerimientos tecnológicos que aún no se cumplen. Se exigen una capacidad de computación enorme, unas comunicaciones superiores al 5G y un desarrollo de inteligencia artificial aplicada a la realidad virtual y realidad aumentada que aún no tenemos.

Pero esto no quiere decir que debamos esperar acontecimientos. Sabemos que en algunas aplicaciones de la IA, como los coches autónomos, el desarrollo no será inmediato ni sorpresivo, sino continuo, sostenido e incremental.

Qué hacer, cuándo hacerlo y dónde

Y si este es el panorama tecnológico, la siguiente pregunta nos lleva al entorno empresarialqué hacer depende de la empresa. Algunos pueden adoptar la postura de esperar acontecimientos, pero es mejor desplegar una actividad más o menos intensa según los casos. Es vital, por tanto, hacer una reflexión sosegada, sentarse y pensar: qué voy a hacer, por qué y en qué plazo.

Desde un punto de vista legal

Otro de los mitos del metaverso es que se trata de un territorio nuevo, donde no hay ley ni orden. Esto no es así.

 Vivimos en Europa, donde el desarrollo de un marco legal sólido para el mundo digital hace mucho tiempo que se está desarrollando. Estamos creando normas para la inteligencia artificial, la economía de los datos y los mercados y servicios digitales, y no solo eso, sino que estamos influyendo en otras áreas del mundo, el llamado 'Brussels effect' aplica a esta nueva economía de manera muy clara. Por tanto, en las actividades económicas relativas al metaverso, como ocurre en las otras referidas, las normas de derecho europeo sobre competencia, protección de datos y protección de los consumidores se aplicarán a todos aquellos que hagan negocios en Europa o con europeos.

Los temas legales provienen en primer lugar de la concepción de esta forma de web 3 en la que nos vamos a mover. No sabemos todavía si será descentralizada (como internet en sus orígenes) o los grandes jugadores se impondrán. Por el momento, encontramos metaversos con esquemas DAO (que plantean cuestiones sobre estabilidad de la organización y responsabilidades) y otros propietarios. En ambos casos, conocer los términos y condiciones es la clave.

Los temas de derecho de la competencia surgirán sin duda. Los usuarios querrán poder moverse por diversos metaversos usando un solo avatar, las plataformas deberán encontrar una solución basada en la interoperabilidad, un concepto de los noventa que ha vuelto con fuerza en la economía de los datos.

Los temas de propiedad industrial e intelectual son ya y serán de gran importancia. Hace tres años, celebramos en marzo en Alicante el I congreso Fide/UA 'Can robots invent and create? A dialogue between Artificial Intelligence and Intellectual Property',” y hablamos de algunos temas relacionados, como lo hicimos unos meses después en el Congreso Fide 'IA, big data y economía digital', celebrado en Oxford. Más tarde, hice unos comentarios en la revista del Foro de Marcas Renombradas sobre nuevos escenarios para las marcas. Aquello que vimos entonces se está materializando ahora.

Las empresas de productos de consumo crean mundos virtuales para acercar o aproximar sus marcas a nuevos consumidores y eso ya nos plantea preguntas: ¿podrás tener un bolso de Vuitton para que lo luzca tu avatar a un precio razonable? ¿Y podrá revenderse? ¿Tengo que registrar mis marcas en el metaverso, en qué clases? ¿Unas zapatillas reales y unas virtuales son el mismo producto? Las oficinas de marcas están ya sentando criterios, es cuestión de poco tiempo que este tema se aclare.

Derivado de esto nos encontramos con la litigiosidad. Ya tenemos algunos conflictos sonados, los casos del bolso Birkin y de Nike son dos ejemplos, habrá más.

Se ha dicho que no se pueden ejercitar acciones por actuaciones llevadas a cabo en el metaverso y eso no es verdad, ya hay resoluciones judiciales que ordenan a las plataformas determinadas medidas. El metaverso está basado en internet y en ese entorno podemos formular reclamaciones a las plataformas, tenemos sistemas de 'notice and take down' en relación con contenidos, etc. Habrá armonización, pero no cambios profundos.

Los NFT y su rol en el metaverso

Los NFT tienen un rol importante en el metaverso. Pero también tienen vida propia, en el arte, los videojuegos y otros sectores en los que la 'tokenizacion' abre posibilidades. Esto lo veremos en otro artículo.

Reflexiones finales

En el metaverso hay realidades actuales y futuras que no podemos dejar de lado, que haya tanto 'hype' no debe llevarnos a pensar que todo es un puro camelo. Tal vez el camino sea más largo del que parecía al principio, pero lo veremos como una nueva fase de la economía digital, en la que será muy difícil no estar implicado. Así que, con prudencia, habrá que ir tomando posiciones, explorando y equivocándose.

¿Qué opinas de este artículo?