EPIs inteligentes — el futuro de la protección de los trabajadores

EPIs inteligentes — el futuro de la protección de los trabajadores

Pero hay que garantizar que el EPI inteligente realmente conduzca a un mayor nivel de protección
21 August 2020

El documento que adjuntamos, elaborado por la Agencia Europea, examina la aparición del equipo de protección individual (EPI) inteligente en el lugar de trabajo.

El EPI inteligente combina los medios de protección tradicionales con materiales mejorados o componentes electrónicos, y puede recopilar datos sobre el usuario, el entorno de trabajo o su propio uso. Aunque estas nuevas tecnologías prometen una mayor seguridad y un mayor bienestar para los trabajadores, quedan aún muchos obstáculos por superar para garantizar su uso efectivo.

El artículo subraya los retos a los que se enfrentan las partes asociadas, como la necesidad de establecer normas y un marco adecuado de prueba y certificación. Incluye recomendaciones para ayudar a las partes asociadas a obtener el máximo partido de los posibles beneficios del EPI inteligente, subrayando la importancia de la colaboración entre usuarios y fabricantes en este ámbito.

Todos estos nuevos desarrollos suenan muy positivos y prometedores. Sin embargo, la situación también es muy compleja. Para garantizar que el EPI inteligente realmente conduzca a un mayor nivel de protección, todas las partes involucradas tienen mucho trabajo por hacer en los últimos desarrollos en este nuevo sector.

Hasta ahora, la electricidad y la electrónica no han sido importantes en el campo del EPI; sin embargo, la electrónica juega un papel importante en los desarrollos recientes, a menudo representando la parte "inteligente" del EPI inteligente. Como consecuencia, los fabricantes y los organismos de evaluación de la conformidad en virtud del Reglamento de EPI de la UE (es decir, los organismos notificados) se enfrentan a un desafío: necesitan "aprender electrónica".

Diseñar un EPI inteligente no es tan simple como ensamblar una cubierta protectora con algunos elementos electrónicos como sensores, baterías y cables. El nuevo producto completo constituye el EPI y debe probarse de acuerdo con el Reglamento de EPI, incluso para asegurarse de que el producto en sí no represente un riesgo para el usuario. Esto no es tan fácil como combinar el EPI tradicional que cumple con el Reglamento de PPE, por un lado, y las partes electrónicas certificadas, por el otro. La combinación de ambos forma el EPI como un todo, y debe probarse como un todo. Esto asegura que no se creen nuevos riesgos inclusión de electrónica. Se deben realizar las pruebas de EPI relevantes, así como las pruebas relacionadas con la seguridad eléctrica, y se deben probar aspectos como la temperatura de la superficie, la seguridad de la batería, los impactos de los campos electromagnéticos (EMF) y la compatibilidad electromagnética (EMC).

Fuente: OSHAeuropa

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