Colombia: Mujeres siguen al alza en cargos de máxima decisión en el Estado
Colombia: Mujeres siguen al alza en cargos de máxima decisión en el Estado
El sector de inclusión social fue el que más jalonó en cargos de máximo nivel decisorio en el Gobierno Nacional.
Con un porcentaje de 43 por ciento, la Rama Judicial fue el sector del Estado en el que más mujeres en cargos de máximo nivel decisorio hubo en el año 2019.
El dato lo arrojó un estudio realizado por la Función Pública y que evaluó el cumplimiento de la ley de cuotas en las entidades del Estado durante el año pasado.
La Ley 581 de 2000, conocida como la ley de cuotas, determinó que en los diferentes niveles de las entidades estatales debe haber al menos un 30 por ciento de mujeres, lo ha venido creciendo en Colombia.
Cada vez son más las mujeres que logran acceder a cargos públicos y que se destacan en altos niveles del mismo.
Sin ir más lejos, la vicepresidencia está en manos de una mujer –Marta Lucía Ramírez–, al igual que más de la mitad del gabinete ministerial, en el que se destacan nombres como los de las ministras del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, la de Exteriores, Claudia Blum, y la de Justicia, Margarita Cabello, solo por nombrar tres importantes mujeres del Gobierno Nacional.
De acuerdo con el estudio de la Función Pública sobre este tema, en la Rama Judicial el 43 por ciento de los cargos de máximo nivel decisorio son ocupados por este género, destacándose instancias como el Consejo Superior de la Judicatura y la Fiscalía General de la Nación.
En cuanto a la Judicatura, la Función Pública informó que “de 6 cargos provistos en este nivel, 5 son ocupados por mujeres”, lo que arrojó el 83 por ciento.
Y la Fiscalía, por su parte, elevó su cuota de mujeres en esta categoría pasando de 38 por ciento en 2018 a 46 por ciento en 2019. “De 71 cargos provistos en este nivel, 33 son ocupados por mujeres”, reza el informe.
En este poder públicos fueron medidas –además de las anteriores– entidades como Medicina Legal, el Consejo de Estado y las Corte Suprema y Constitucional.
En el Gobierno
Por los lados de la Rama Ejecutiva, es decir del Gobierno, el estudio evidenció que se creció un punto en la participación de mujeres en cargos de máximo poder decisorio, pasando de 40 por ciento en 2018 a 41 en 2019.
En esta instancia se destacó que el 84 por ciento de mujeres que están en ese nivel tienen un posgrado y el 12 por ciento son profesionales.
Igualmente, el sector que más se contribuyó fue el de inclusión social, con el 77 por ciento de los cargos de máximo nivel decisorio en manos de mujeres. En este grupo se incluyen el Departamento para la Prosperidad Social, el Centro de Memoria Histórica, la Unidad de Víctimas y el Bienestar Familiar.
En contraste, los dos sectores en los que fue más baja la participación femenina en cargos de alto nivel decisorio fueron defensa e inteligencia y contrainteligencia.
Aunque el Congreso bajó sustancialmente del 58 por ciento en 2018 al 40 por ciento en 2019 en esta categoría, se mantuvo en el promedio del Estado.
Sobre la Rama Legislativa, la Función Pública identificó que “parte de las variaciones entre uno y otro año corresponden a las diferentes interpretaciones de los cargos en los niveles decisorios a los cuales les aplica la ley de cuotas”.
No obstante, la entidad que realizó el informe destacó que en otros niveles decisorios hubo un crecimiento del 35 al 48 por ciento en el último año.
Órganos de control
Otro grupo de entidades estatales medido fueron los entes de control, básicamente la Procuraduría, la Auditoría General, la Contraloría General de la República, la Defensoría del Pueblo y el Fondo de Bienestar Social del órgano de vigilancia fiscal.
En estas instancias el 42 por ciento de los cargos de máximo nivel decisorio estuvieron en manos de mujeres en 2019, aunque, según la Función Pública, bajó un punto con respecto al 2018.
Aquí se resaltó la participación de mujeres en el Fondo de Bienestar Social de la Contraloría, la cual fue, en cargos de máximo poder decisorio, del 67 por ciento.
Y la única instancia medida que no alcanzó los niveles mínimos en esta categoría fue la Organización Electoral, la cual se quedó en el 24 por ciento en el estudio de la Función Pública.
“Se evidencia un aumento en el cumplimiento en la Ley de Cuotas, puesto que se registraron entidades con un nivel superior al umbral (30%), lo que garantizó efectivamente la inclusión y participación de la mujer en cargos públicos con poder de decisión. En este sentido, es determinante fomentar el cabal cumplimiento de la Ley 581 de 2000 mediante la aplicación real de las medidas sancionatorias que esta contempla”, concluye el estudio.
'La celebración sigue siendo incompleta'
Tres preguntas a Paola Silva, miembro del colectivo feminista Siete Polas.
¿Por qué es importante que la participación de las mujeres en la política siga aumentando?
Celebro que la participación de las mujeres en los cargos directivos del Estado haya alcanzado el 44,7 %, superando lo estipulado en la ley de cuotas, que es el 30 por ciento, y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible del 2019. La ley de cuotas, sin duda, es una gran herramienta para hacerlos cumplir. Pero la celebración sigue siendo incompleta mientras las mujeres no seamos al menos el 50 por ciento de las personas que ocupan cargos directivos en el Estado, en el sector privado y, por supuesto, en las corporaciones de elección popular.
Nunca me voy a cansar de decir la importancia de la representación de las mujeres en todas las esferas de la sociedad. Las mujeres llevamos tan solo 65 años con derecho al voto, con ser ciudadanas reconocidas. Nuestra participación en política no es que sea importante, es nuestro derecho. Las mujeres somos el 52 % de la población del país, pero aun así no llegamos al 50 % de los cargos de poder en el Estado y mucho menos en el sector público.
¿Qué destaca del informe?
El informe muestra la distribución de las mujeres en cargos directivos en el Ejecutivo: en inclusión social es el 77 % y en Defensa, solo el 23 %. Esto nos dice dónde nos quieren, cómo nos quieren y por qué. Doce de los sectores por rama no superan el 40 %, lo que indica que aún hay un trabajo por hacer; lo importante es que sea paritario y transversal a todos los sectores.
¿Con qué obstáculos se encuentran normalmente las mujeres que quieren participar en política?
Las mujeres nos estamos estancando en los cargos medios de las organizaciones. La transición hacia los cargos directivos es importante. En el sector público persisten los estereotipos de género, los procesos de selección inequitativos y el acoso sexual.