La doble discriminación de los parados con discapacidad y más de 45 años

Más de la mitad de los desempleados con discapacidad en España es mayor de 45 años, lo cual puede dificultar todavía más su acceso al mercado laboral en un contexto tan agresivo como el actual.

Estar en el paro no es una alegría para nadie, pero existen algunos colectivos sobre los que debemos reflexionar con mayor profundidad para evitar que la discriminación que sufren pueda perpetuar esta situación. Entre estos segmentos de población en riesgo de exclusión encontramos tanto a los trabajadores de mayor edad (entre 45 y 65 años) y aquellos que cuentan con alguna discapacidad -física o intelectual-. E, incluso, cuando ambos factores se dan simultáneamente.

Y es que, la discapacidad y la edad avanzada pueden derivar en una doble discriminación hacia estos desempleados. Así lo advierte la Fundación Adecco y parece que es una impresión llena de razón: según los últimos datos del INE, más de la mitad (51,3%) de los desempleados con discapacidad es mayor de 45 años. Esta proporción es inferior entre los parados sin discapacidad (35,3%).

Como puede verse en la gráfica superior, en la población general es el grupo de personas entre 25 y 44 años el que presenta un mayor peso sobre el total (49,8%) de los desempleados; todo lo contrario que entre los que sufren alguna discapacidad. 

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En ambos grupos, los jóvenes -entre 16 y 24 años- son el segmento poblacional que menos peso tiene sobre el global del paro: un 14,9% entre las personas sin discapacidad frente al 8,2% de aquellos que presentan una o varias discapacidades.

“La razón que subyace a esta realidad la encontramos en las discapacidades no congénitas. Es decir, las que no son de nacimiento: a mayor edad, más frecuentes son las discapacidades sobrevenidas, ya sean por enfermedad o a causa de un accidente laboral”, explican desde Adecco.