Las quejas sobrevaloradas del precio del agua

Es una realidad que el precio del agua lleva cinco años de subidas considerables (20% aproximadamente desde 2007), pero aún así el coste de la distribución y saneamiento del agua sigue sin cubrirse. Los costes de infraestructura son muy elevados, y a pesar del incremento del precio siguen sin cumplirse los requisitos mínimos establecidos por la Directiva Marco del Agua.

De este aumento del precio han surgido las recientes quejas, “masivas”, haciendo alusión al elevado coste que paga el consumidor por el servicio. Aunque más que masivas, podrían catalogarse como ruidosas. Pero, el análisis del coste de las diferentes utilities me lleva a pensar que tales reivindicaciones son, una vez más, un movimiento populista promulgado por sectores con intereses personales.

Para ello me baso en los datos anexados, donde se puede ver una evolución decreciente del gasto por persona en agua, en los últimos dos años con información disponible, en el conjunto de España de un 8,7%, del teléfono un 3% pero un aumento del pago por la electricidad de un 4%. En conjunto, el coste que se paga por habitante medio en utilities en 2012 se sitúa en 712€ por habitante, siendo un 1% inferior al 2011.

Pero, las diferencias son más significativas si se analiza el coste relativo según el gasto de los hogares, sin tener en cuenta cifras absolutas. De ello, obtenemos que el 6,41% del gasto de los hogares se destina al pago de las utilities consideradas, pero de ello sólo el 0,66% corresponde al pago del agua. El resto, se reparte entre telefonía (2,98%) y electricidad (2,83%). Las diferencias entre utilities son mayores si se analizan sólo los hogares con rentas inferiores a 1000€ mensuales, donde el gasto en agua supone un 0,90%, el de electricidad un 3,86% y el teléfono un 4,06%.

Personalmente considero que el pago de menos de un 1% del gasto que realiza un hogar por un servicio tan básico y necesario como es el agua, es algo irrisorio, y más si ello incluye el ciclo integral. Y, que no haya quejas sobre el coste de otros servicios menos necesarios me parece parte de un movimiento populista. Todo servicio, por básico, necesario y universal que sea, tiene un coste que se debe sufragar. Dejémonos de pagar tarifas de teléfono desorbitadas u otros servicios totalmente prescindibles y atendamos a los servicios necesarios que no pueden, ni deben, ser gratis.

*Datos obtenidos del INE, Encuesta de Suministro y Saneamiento del agua y Gasto de los Hogares (2012).