El aire en la Tierra es como el de un recinto cerrado

El aire en la Tierra es como el de un recinto cerrado

Durante 2013 el observatorio de Mauna Loa (Hawaii) registró por primera vez en la historia del planeta una media diaria por encima de 400 partes de CO2 por millón en el aire. Fue el lunes 13 de mayo.
8 Enero 2014

Una de mis consultas diarias es la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera. Lo hago a través de la cuenta de Twitter Keeling Curve, de la universidad de California, que publica la lectura diaria del nivel de CO2 medido en su observatorio de Mauna Loa (Hawaii).

Tal y como las predicciones anticipaban, durante 2013 el observatorio registró por primera vez en la historia del planeta una media diaria por encima de 400 partes de CO2 por millón en el aire. Fue el lunes 13 de mayo.

Los ciclos estacionales de las corrientes de aire en el océano pacífico hacen que cada año, el mes de mayo sea el mes de mayor concentración de COy octubre el de menos. Por este motivo, la curva de Keeling tiene su característica forma de diente de sierra.

Con un incremento anual de 2 ppm por año aproximadamente, en el año 2040 la concentración será de unas 450 ppm. A ese punto se llegará aunque disminuyesen radicalmente las emisiones de CO2 a la atmósfera (procedentes mayormente del uso de combustibles fósiles -cosa poco probable-), a causa del efecto “inercia” del actual uso de recursos de que se está realizando.

Se excederá por tanto, otro punto crítico designado por los científicos: 430ppm ocasionarán el aumento medio de 2ºC de la temperatura media global. Será por la década de los años ´30 y para entonces se habrá tenido que actuar de forma eficaz sobre este factor del cambio climático.

La curva de Keeling irá indicando si realmente se está o no se está haciendo algo a nivel global.

Llevado al límite -cuando la inconsciencia humana tiende a infinito-, se ha calculado que el uso de todas las reservas de combustibles fósiles en el planeta elevarían la concentración a unas 1600ppm y la temperatura del planeta entre 4 y 10ºC. Con unas consecuencias no determinadas.

Lo que ya estamos sufriendo son las consecuencias directas de este hito sobre la salud humana quedan resumidas en un dato desolador: el aire de la atmósfera es, en el mejor de los casos, de la misma calidad el que respiramos dentro de un recinto cerrado.

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