La prevención de riesgos laborales en Andorra

Introducción

El accidente laboral y sus repercusiones tienen un gran impacto tanto a nivel económico como en el social. Según fuentes de l’Europan Agency for Safety and Health (EU-OSHA) desde hace tiempo todos los gobiernos reconocen que unas condiciones de salud y seguridad no adecuadas suponen grandes costos para el Estado en áreas como la seguridad social, las lesiones laborales, indemnizaciones, costos de tratamientos médicos y una disminución de la productividad laboral [1].

El mundo del trabajo es cambiante y tiene grandes repercusiones en relación a la seguridad y la salud en el trabajo. En el último informe elaborado por EU-OSHA y titulado “Prioridades para la investigación sobre seguridad y salud ocupacional en Europa: 2013-2020” se han identificado una serie de áreas prioritarias básicas para la investigación de la seguridad y salud en el trabajo que contribuirán a lograr los objetivos de Europa 2020. Las prioridades se han establecido alrededor de cuatro temas principales: los cambios demográficos; la globalización y el mundo laboral cambiante; la seguridad y salud en el trabajo y nuevas tecnologías; y la creciente exposición a agentes químicos y biológicos en el trabajo [2].

El papel de la salud y la seguridad en el trabajo es fundamental para incrementar la competitividad y la productividad en las empresas y así contribuir a la viabilidad de los sistemas de protección social ya que el resultado es una reducción del coste de los accidentes, de los incidentes y de las enfermedades, y en un aumento de la motivación y satisfacción de los trabajadores, mejorando las relaciones internas de la empresa y provocando un cambio de actitudes del personal, al ser percibida por el colectivo de la empresa como una garantía de intereses [3] hecho que comporta un aumento de la productividad y creatividad de los trabajadores y una mayor identificación con los objetivos empresariales [4].

Así, los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales son una gran carga para los sistemas de protección sociales públicos y privados hecho que requiere una respuesta integrada, coordinada y estratégica, así como la colaboración entre las principales partes interesadas de la Unión Europea en lo que respecta a la elaboración de políticas comunitarias y nacionales. Según datos de la OIT de 2012 [5] cada 15 segundos muere una persona como consecuencia de una actividad o enfermedad relacionada con una actividad laboral. Se estima que la carga económica de los accidentes y enfermedades profesionales representa cada año el 4% de PIB mundial.

La reducción de la siniestralidad laboral y la mejora de la competitividad empresarial requieren de un sistema de gestión de la seguridad y salud laboral que promueva comportamientos seguros y la implicación personal de los trabajadores en actividades vinculadas con su bienestar laboral. La literatura no ha llegado a un consenso en relación a las dimensiones que componen este sistema de gestión.

Los beneficios derivados de unas adecuadas condiciones laborales son múltiples y tienen receptores directos e indirectos: los directos, son los propios trabajadores (principales afectados por el accidente laboral) y la empresa (ya que mejora la rentabilidad y evita pérdidas). En cuanto a los beneficiarios indirectos, son las aseguradoras, los contratistas, los consumidores, las familias y la sociedad en general. Aún así, se observan grandes diferencias entre la naturaleza del daño causado por el accidente, en los costes asociados y en el sistema de valoración, tal como se aprecia en la figura 1 [6].

Existe un gran debate e interés por la prevención de riscos laborales y su gestión en todos los ámbitos como consecuencia de las implicaciones que supone. Se observa una gran preocupación social y desde las Administraciones se están poniendo en marcha diversas políticas que tienden a aumentar el compromiso de las empresas hacia la eliminación y reducción de los riesgos laborales.

Figura 1: Clasificación de costes-beneficios de la seguridad y salud en el trabajo

Esta preocupación ha transcendido el ámbito académico, tratando de identificar las prácticas correctas en gestión, así como las actitudes y comportamientos que han de adoptar todos los integrantes de una organización, con la finalidad de conseguir una sostenida reducción de los riesgos y una mejora de la calidad de vida laboral [7].

Con la finalidad de reducir la siniestralidad y, de esta manera mejorar la competitividad de la empresa, es necesario un nuevo enfoque de la prevención, considerando todos los riesgos existentes en el lugar de trabajo, hecho que supone un tratamiento global y multidisciplinar. El modelo organizativo que plantean diversos autores es una gestión de seguridad integrada en el proceso y en todos los niveles jerárquicos de la empresa y en donde la seguridad sea considerada inseparable de los procesos de fabricación y en donde las funciones correspondientes a la seguridad se transfieran a tota la línea jerárquica [8].

El Principado de Andorra es muy joven en la carrera hacia la prevención de riesgos laborales y sobre todo en el cambio de mentalidad empresarial y social que todo ello supone. Las nuevas exigencias ponen al país en la tesitura de dar las mismas respuestas que cualquier otro país de nuestro entorno inmediato; pero si tenemos en cuenta sus dimensiones y recursos, hay que hacer una reflexión de todo lo que supone la integración de leyes, normas, recomendaciones europeas e internacionales, cambio de mentalidad y de maneras de hacer de décadas de funcionamiento.

Andorra se encuentra en un momento clave para su desarrollo y cambio de tendencia por lo que se refiere a nuevas maneas de producir y de implicación del trabajador en el sistema de gestión empresarial. Este artículo tiene el objetivo de dar una primera pincelada en relación al mundo laboral de Andorra y sus primeros pasos en relación con la prevención y la seguridad laboral activa.

El contexto laboral de Andorra

El Principado de Andorra se encuentra situado en los Pirineos. Este territorio presenta una extensión aproximada de 468 km² con una densidad de población de 167 h/km² y 76.098 habitantes, de los cuales un 51% de la población corresponde a hombres y el 49% restante a mujeres [9].

Las dos características de la población andorrana son: el fuerte crecimiento que ha registrado de una manera casi ininterrumpida desde mediados del siglo XX y la proporción elevada de residentes de diversas procedencias y nacionalidades (figura 2). Los dos aspectos tienen relación directa con el proceso de expansión económica que ha vivido Andorra desde final de la década de los años 50 y que requirió un gran volumen de mano de obra procedente del exterior, principalmente, de España y Portugal. El número de asalariados de la Caixa Andorrana de la Seguretat Social (CASS) fue, en año 2013, de 35.593 trabajadores [10].

Figura 2: Evolución de la población de Andorra

En la figura 3 observamos como la tasa de ocupación de la población de Andorra, calculada como la proporción total de personas asalariadas a la Caixa Andorrana de Seguretat Social (CASS) en relación con la población en edad laboral (entre 15 y 64 años), ha disminuido en los últimos años [11].

Figura 3: Comparativa tasa de ocupación

Se observa que la tasa de ocupación de la población andorrana es superior a la de los países vecinos (España y Francia) y la de los países de la UE, aunque también observamos como la crisis global que afecta a todo nuestro entorno, también ha hecho mella en el tejido económico y empresarial andorrano.

La prevención de riesgos laborales en Andorra

La Llei 34/2008 de la Seguretat i la Salut en el Treball es a partir del año 2008 una realidad en el Principado de Andorra y con la cual han de trabajar todas las empresas del país. La aplicación de la normativa ha sido progresiva y de carácter obligatorio, y el pasado año 2013 los empresarios de Andorra la tuvieron que implantar en su totalidad [12]. La ley, para cubrir las recientes exigencias en materia de seguridad y salud en el trabajo da diferentes opciones, muy en la línea de los países de nuestro entorno inmediato: la asunción personal por parte del empresario, la designación de trabajadores o la contratación de un Servicio de Prevención Ajeno.

En la figura 4 podemos comprobar cómo Andorra, en el ámbito europeo, ha sido de los últimos países que ha implantado en sus leyes todo el corpus jurídico en relación a la Prevención de riesgos laborales y de la salud laboral. Esta gráfica puede dar idea del salto legislativo que ha realizado Andorra para adaptarse a su entorno y para adecuarse a las exigencias de producción de una economía global.

Figura 4: País y año de implantación de la Ley en PRL y SL

La implantación de la Ley 34/2008 de la SST ha comportado muchos cambios en la manera de funcionar de muchas de las empresas que componen el sistema económico del país:

- implantación de empresas de prevención de riesgos laborales para dar el soporte necesario al entramado económico del país,

- un salto normativo muy importante para un país de pequeñas dimensiones y muchos requerimientos a nivel europeo e internacional,

- una red de empresas donde la mayoría tienen un perfil de pequeña empresa (el 90% de las empresas del país tiene menos de 10 trabajadores),

- una baja cultura de prevención de riesgos laborales que ha comportado que una gran parte de la ciudadanía y del empresariado no entienda o no tenga integradas muchas de las obligaciones actuales pautadas por la ley,

- una coyuntura económica complicada para implantar toda una serie de normativas que para el empresario son vistas como un gasto y no como una inversión.

En resumen, Andorra y su tejido empresarial tienen que adaptarse a las nuevas exigencias de producción y tener en cuenta que la gestión integral de la seguridad y salud en el trabajo son herramientas que nos permitirán competir con las economías más desarrolladas de nuestro entorno europeo.

Evolución de los accidentes en Andorra

En relación a los accidentes laborales, la tendencia es decreciente pero lineal. Si observamos la figura 5 vemos que en valores absolutos han bajado los accidentes laborales y esta disminución progresiva, sospechamos que ha ido ligada principalmente a la reducción de la masa salarial de trabajadores (un 3,5 menos de accidentes laborales respecto a los datos de 2012). Según los datos registrados, en los últimos 5 años sólo han bajado los accidentes laborales poco más de un punto porcentual en el Principado de Andorra.

Resulta curioso que la evolución entre 2006 y 2013 muestre una reducción del 36% tanto para los accidentes como para las bajas laborales (a una variación de medio punto). Por otro lado, y por lo que respecta a los dos últimos dos años, las variaciones entre 2011 i 2013 son más dispares. Mientras que los accidentes laborales se reducen de un 7%, las bajas laborales lo hacen tan solo de un 4,8% y, simultáneamente, los días de baja se incrementan de casi un 15%, es decir, los accidentes se reducen dos puntos más que las bajas pero se dan muchos más días de baja por accidente. Sin perder de vista que la población asalariada ha disminuido sensiblemente, especialmente en el sector de la construcción que era el sector que tenía el porcentaje más elevado, por lo que respecta a los accidentes laborales.

La tendencia de los últimos años es que el sector del comercio y la reparación de vehículos, es el sector que ha tenido más accidentes, con 654, mientras que la construcción ocupa el segundo lugar en la ocurrencia de accidentes con 584, seguidamente del sector de “otras actividades sociales y servicios prestados” con 570 y el sector de hostelería con 522 accidentes registrados.

Figura 5: Evolución de los accidentes en Andorra

En relación al número de bajas laborales, también se han reducido respecto a años anteriores. Así, en 2013, se han computado 1.664, un 3,6% por debajo de las 1727 que se habían producido en el año precedente. Cabe destacar que si bien los accidentes van a la baja, no pasa lo mismo con la media de días de baja laboral, que se situó durante el 2013 en 54 días, es decir, 5 días más respecto a 2012 [13].

Figura 6: Índice de incidencia por sectores laborales

En la figura 7 vemos que la tendencia podría ser que a medida que la aplicación de la Lley 34/2008 de la Seguretat i la Salut en el Treball se vaya interiorizando por parte de los agentes implicados, y sobre todo, que el cambio de hábitos sea real en el medio laboral, se produzca una reducción de la siniestralidad  laboral [14]. Tendremos que ver la evolución de estos datos y contrastarlos con otros trabajos de investigación. Si comparamos el índice de siniestralidad respecto a otros países de la UE (figura 8), Andorra se encuentra por encima del índice de incidencia español y catalán y la tendencia muestra que está por encima también de Francia y el resto de Europa, aunque no se disponen de los datos que lo confirmen[15].    

Figura 7: Índice de incidencia de los accidentes de trabajo en Andorra

Figura 8: Comparativa accidentes con baja laboral (índice de incidencia)

Metodología

En el presente trabajo se han utilizado artículos académicos referentes a la prevención de riesgos laborales. La documentación se ha obtenido principalmente a través de las bibliotecas de la UOC/UPC y de sus respectivas bases de datos; para la búsqueda se utilizan las palabras clave: prevención, accidentes laborales, gestión, del año 2000 a 2014.

- Web of Knowledge

- Google Scholar

- Scopus.

También se han utilizado bases de datos de diversos organismos públicos referenciados en la bibliografía. Más que un trabajo de tipo bibliográfico, es una aproximación inicial a la situación de Andorra en relación a la prevención de riesgos laborales con la intención de profundizar en otros trabajos posteriores.

Resultados y conclusiones

La comparativa de diversos indicadores muestra que Andorra tiene aún un largo recorrido en lo que respecta a la prevención de riesgos laborales. La bibliografía consultada nos muestra que en la ocurrencia del accidente laboral intervienen múltiples factores que tendremos que abordar para poder entender las dinámicas que se producen o intervienen cuando se produce un accidente laboral.

En los accidentes de tránsito y en los accidentes laborales, con todo lo que comportan respecto a muertos y lesionados y en relación con su frecuencia más elevada, son interpretados per la población como menos peligrosos que las caídas de aviones o que los grandes accidentes industriales. Esta situación está relacionada con factores de tipo subjetivo, estudiados en las investigaciones de la percepción del riesgo, disciplina que aunque es relativamente reciente, ya apunta a que el factor humano es un ítem o variable de interés en los estudios del riesgo laboral [16].

El presente artículo quiere ser un punto de partida para la investigación de diversos aspectos relacionados con la prevención del accidente en el medio laboral y la integración de todo el proceso en un sistema único de gestión que tenga como objetivo primordial la seguridad del trabajador y el fomento de un entorno seguro.

Agradecimientos

Agradezco al Dr. Pedro R. Mondelo su ayuda y soporte en todo momento como también a todo el quipo de ORPconference 2014.

Referencias bibliográficas

• 1. European Agency for Safety and Health at Work; Repercusión económica de la seguridad y salud en el trabajo en los Estados miembros de la Unión Europea (1998)
• 2. European Agency for Safety and Health at Work; Priorities for occupational safety and health research in Europe: 20132020. ISSN: 18319351
• 3. Bestraten, M., Gil, A. y Piqué, T.; La gestión integral de los accidentes de trabajo (III): costes de los accidentes. (2003). Nota Técnica de Prevención. No. 594. Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo
• 4. Fernández  B., Montes J., Vázquez C.; Desarrollo y validación de una escala de medición para el sistema de gestión de la seguridad laboral. (2006). Investigaciones europeas de dirección y economía de la empresa, 12(3), 7793
• 5. Oficina Internacional del Trabajo: ILO.(2012). La OIT en acción: resultados de desarrollo 20102011 (2012). Ginebra: 1v.
• 6. Aaltonen, M. y Söderqvist, A.;  Costs of accidents in the furniture industry: a Nordic study. (1988). Scandinavian Journal of Work Environment & Health. Vol. 14, pp. 103104
• 7. Fernández  B., Montes J., Vázquez C.; Desarrollo y validación de una escala de medición para el sistema de gestión de la seguridad laboral. (2006). Investigaciones europeas de dirección y economía de la empresa, 12(3), 7793
• 8. Izquierdo N., Terrés F., Mondelo P.; Cultura y clima preventivo en las organizaciones. ORP2004 3rd International Conference on Occupational Risk Prevention.
• 9. Ministeri de Finances i Funció Pública. Departament d’Estadística. Govern d’Andorra
• 10. Caixa Andorrana de la Seguretat Social (CASS)
• 11. Departament d’Estadística del Govern d’Andorra, Idescat, INE, Eurostat
• 12. Observatori de Riscos Laborals d’Andorra: ORLA. Consells d’aplicació Llei 34/2008
• 13. Caixa Andorrana de la Seguretat Social (CASS)
• 14. Ministeri de Finances i Funció Pública. Departament d’Estadística. Govern d’Andorra
• 15. Datos extraídos de: Caixa Andorrana de la Seguretat Social, Servei d’Inspecció Laboral del Govern d’Andorra,  Idescat, INSHT y INRS
• 16. Carbonell A., Torres S. (2010). Evaluación de percepción de riesgo ocupacional. Ingenieria Mecànica. Vol 13. Nº3, septiembrediciembre, p.1825. ISSN 18155944.