¿Es rentable la prevención? Cambiemos de perspectiva

Todavía hoy seguimos analizando la rentabilidad de las actuaciones preventivas teniendo en cuenta básicamente dos consecuencias derivadas de la no-prevención: por un lado, los costes sociales y daños para la salud del trabajador y, por otro, los costes legales y de gestión. Con estos datos fácilmente podemos hacer los cálculos necesarios para determinar que la prevención sí es rentable.

Para apoyar estas afirmaciones ya se ha hecho más de un estudio en el que, paso a paso, ésta queda claramente demostrada (ver, por ejemplo, la NTP 472: Aspectos económicos de la prevención de riesgos laborales: caso práctico), pero utilizando la lógica... ¿por qué nos limitamos a esta perspectiva cuando podemos hacer una prevención verdaderamente rentable?. Es decir, podemos evitar sanciones y hacer una prevención rentable o podemos evitar accidentes y hacer una prevención verdaderamente rentable. En el primer caso nos resulta beneficioso a corto plazo; en el segundo caso, a corto, a medio y largo plazo.

Si a cualquiera de nosotros nos preguntaran si implantar un modelo de gestión de calidad en nuestra empresa es económicamente beneficioso, ninguno dudaríamos en contestar que sí, rápidamente veríamos los beneficios que nos reporta. Entonces, ¿qué hace que veamos de forma diferente la gestión de prevención de riesgos?. Supongo que todavía la "cultura de la calidad" está menos arraigada en nosotros que la "cultura de la prevención".

Quizá deberíamos ampliar nuestra perspectiva para sacarle el máximo provecho a unas tareas preventivas que por ley hemos de realizar.

Antes que nada la prevención es necesaria, pero si además resulta que también es económicamente rentable y nos aporta una serie de mejoras en nuestra empresa, pues mejor que mejor.

Juan Fco. Gilabert Maciá

Gerente de EPICAjfg@epica.es

www.epica.es