Regulación del tabaquismo en el centro de trabajo

Regulación del tabaquismo en el centro de trabajo

divendres, 30 novembre 2001

El consumo de tabaco ocasiona uno de los principales problemas de pérdida de salud, siendo la primera causa evitable de enfermedad y muerte prematura en el mundo occidental.

Los índices de prevalencia del tabaquismo en nuestro país, nos indican un ligero descenso global, pero todavía nos encontramos por encima de los de la Comunidad Europea y con un patrón de consumo en referencia al sexo que se ha invertido en los últimos años en detrimento de las mujeres.

El Tercer Plan de Actuación para una Europa sin Tabaco (1997-2001) de la Organización Mundial de la Salud, fija entre sus objetivos para el año 2001 el establecimiento de leyes que garanticen la eliminación de la exposición involuntaria al humo ambiental del tabaco en todos los lugares de trabajo.

La legislación es un instrumento idóneo para la prevención y control del tabaquismo. El Real Decreto 1293/1999 que modificó el 192/1988 sobre limitaciones en la venta y uso del tabaco, regula los lugares públicos donde está prohibido el consumo del tabaco.

En este contexto cobra vital importancia el proyecto de ley para la restricción del tabaco en los centros de trabajo, que deberá ser de gran ayuda para la consecución de estos fines, conjuntamente con las restantes normativas que en cada Comunidad Autónoma van apareciendo.

Además, es necesario sensibilizar a la población, proporcionándole información, educación y asistencia sanitaria, elaborando programas laborales de deshabituación tabáquica como una prioridad dentro de nuestras actividades cotidianas e implicando a todos los estamentos de la empresa.

Para las empresas, existen poderosas razones para restringir el consumo de tabaco durante la jornada laboral. Entre otras muchas, destacaría como prioritaria, la protección de los trabajadores de los riesgos del humo ambiental, sobre todo a los no fumadores y mujeres embarazadas, ya que existe evidencia científica de los efectos nocivos del humo ambiental para la salud de las personas expuestas.

Para no deteriorar el clima laboral, es fundamental introducir las políticas y las prácticas restrictivas de forma paulatina y con el máximo consenso entre todos los implicados. Todo ello en beneficio de una buena convivencia y para contribuir, de esta forma, a la conservación del medio laboral y favorecer las relaciones de trabajo.

La regulación de espacios sin tabaco en las empresas será una tarea ardua pero necesaria para limitar este hábito y contribuir a mejorar el ambiente de trabajo. La creación de ambientes libres de humo conllevará a la habilitación de zonas para fumadores con una delimitación clara del espacio y con unas buenas condiciones higiénicas.

Conseguir la sensibilización de todos y su implicación en la lucha antitabaco, puede contribuir notablemente a la concienciación social, favoreciendo a crear un clima que propicie la disminución de este problema.

Les animo a que nos acompañen en el que será el segundo debate organizado por la Vocalia de Catalunya i Balears de la Sociedad Española de Salud Laboral en la Administración Pública sobre la regulación del tabaquismo en los centros de trabajo, donde esperamos analizar en profundizar este tema tan actual y apasionante.

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