El plan de prevención
El plan de prevención
El RD 604/2006 especifica los elementos que debe contener un plan de prevención de riesgos laborales. Este nuevo requerimiento legal ha ayudado a convertir ideas difusas en un manual para trabajar por la prevención.
Henkel Ibérica editó su primer plan de prevención en diciembre de 2006. En 30 páginas, siguiendo la guía que representa la norma, se intentan reflejar los aspectos fundamentales del sistema de gestión de la prevención de riesgos laborales en la compañía. La formación del plan a toda la plantilla se está convirtiendo en un excelente instrumento para integrar y promover la prevención en la empresa.
La siniestralidad laboral sigue siendo un problema de enorme magnitud desde el punto de vista social y económico, 13 años después de la entrada en vigor de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales[1], y a pesar de haberse desarrollado toda una importante serie de reglamentación relacionada.
En dicha ley se habla por primera vez de planificar la prevención, pero es en el Reglamento de los Servicios de Prevención[2] donde se concreta que el establecimiento de una acción de prevención de riesgos integrada en la empresa supone la implantación de un plan de prevención de riesgos que incluya la estructura organizativa, la definición de funciones, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos necesarios para llevar a cabo dicha acción. La siguiente referencia normativa al plan de prevención se hace en la ley 54/2003[3], pero donde realmente se especifican de forma clara los elementos que deben componer un plan de prevención es en el RD 604/2006[4]. Este Real Decreto se ha convertido en una especie de guía para elaborar lo que puede ser un manual que explique los elementos fundamentales del sistema de gestión de la prevención de riesgos laborales de la compañía.
Está claro que la normativa busca una vez más la reducción de los preocupantes índices de siniestralidad laboral existentes en nuestro país. Según los datos publicados por el Ministerio de Trabajo[5], el índice de frecuencia de accidentes en España en 2006 es superior al que había en 1995, año de la publicación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. El único comportamiento positivo lo hallamos en el índice de frecuencia de los accidentes mortales, que ha ido reduciéndose de manera más o menos progresiva a la mitad desde 1990 a 2006. Por el contrario, el comportamiento del índice de gravedad ha sido más variable, reduciéndose e incrementándose en los últimos 15 años y teniendo en 2005 el mismo nivel que en 1995.
Esas dramáticas cifras nos demuestran que la abundante legislación desarrollada desde la publicación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales ha servido de poco.
A juzgar por los requisitos recogidos en el Real Decreto 604/2006, se puede decir que esta última iniciativa legislativa busca combatir la improvisación por parte de las empresas en materia de prevención de riesgos laborales. Obligando a elaborar un plan que contemple la identificación de las características de los centros de trabajo y de la actividad productiva, la estructura organizativa de la prevención, los objetivos y los recursos humanos, técnicos, materiales y económicos disponibles para conseguirlos, se está dando una vuelta de tuerca más para que las empresas cuenten por fin con un verdadero sistema organizado de gestión de la prevención de riesgos laborales.
Henkel Ibérica editó en 2006 su primer plan de prevención de acuerdo con los requisitos del Real Decreto 604/2006. Se trató de compilar en 30 páginas los aspectos más relevantes del sistema de gestión de la prevención de riesgos laborales. Desde el primer momento nuestra compañía ha usado ese plan como una herramienta fundamental para integrar y promover la prevención en todos los niveles jerárquicos de la organización, ejerciendo una labor didáctica a través del envío del plan a todos los empleados y de la elaboración de un ambicioso calendario de formación del propio plan a toda la población trabajadora.
El plan de prevención de riesgos laborales es un elemento tan vivo como la propia compañía, y deberá ser testigo de los cambios que se vayan produciendo en todos sus aspectos. La actualización anual del plan deberá servir para mejorarlo y darle la forma y contenido más adecuados para cumplir esos objetivos.
Para visualizar el resto del artículo pulseaquí.