La oficina ergonómica: Evaluación y mejora.

La oficina ergonómica: Evaluación y mejora.

divendres, 25 gener 2002

Existe una definición no oficial de la ergonomía. En 1949, Murruel la definió como "El estudio científico de las relaciones del hombre y su medio de trabajo". La ergonomía no se considera una ciencia, sino una disciplina que utiliza ciencias como la medicina el trabajo, la fisiología, la psicología, la sociología, la ingeniería, entre otras, convirtiéndose en una tecnología íntimamente relacionada con el bienestar de las personas respecto al medio ambiente y al espacio que ocupa en su puesto de trabajo. Alcanzar unas condiciones ergonómicas óptimas nos aproxima a la idea de confort.

Las Administraciones están muy preocupadas aún en los temas de seguridad: hay que modernizar los edificios, poner al día el mantenimiento, hacer planes de emergencia, etc. tal y como venimos destacando en debates, sobre estos asuntos, organizados por la Sociedad Española de Salud Laboral en la Administración Pública (SESLAP).

Ahora que se considera a los funcionarios trabajadores (desde la Ley 31/95), hay verdaderas sorpresas al evaluar los riesgos ergonómicos y surgen preguntas como:

¿sentarse mal delante de un ordenador es un riesgo? ¿las sillas tienen que ser especiales? ¿el mostrador resulta incómodo a la auxiliar que es bajita? ¿cargar con los archivos también da problemas? ¿no hay suficiente luz? ¿hay que comprar una grapadora eléctrica? ¿sellar, sólo sellar, la documentación puede ocasionar problemas graves? ¿pasan frío los inspectores? ¿es un esfuerzo trajinar los utensilios de cocina? ¿que no hay buena ventilación? ¿deben darse las instrucciones claras y por escrito? ¿los planos del nuevo centro tienen que ser revisados por los de prevención?... entre tantas otras.

Y eso, o su incumplimiento ¿perjudica o puede perjudicar a la salud?

A los que vivimos la prevención en la Administración día a día, no hace falta que nos den las respuestas. Pero no olvidemos que una buena respuesta por parte de los técnicos en prevención es la puerta que abrirá el futuro a la ergonomía y a la psicosociología. Hay que ser convincentes, claros y prácticos.

¿Cómo dar respuesta, no a los factores de riesgo ergonómicos, que esos ya los identificamos y evaluamos, sino a la gestión eficaz de la aplicación de las medidas preventivas en nuestras administraciones? ¿Son suficientes las normas y criterios de referencia para aplicar la calidad a las evaluaciones ergonómicas?

Este tercer debate pretende una aproximación a nuestras realidades y a nuevos o compartidos planteamientos sobre el abordaje de una especialidad escabrosa, por las dificultades que se presentan a la hora de evaluar, por lo costoso en recursos materiales a la hora de aplicar algunas de las medidas preventivas (¡hay que modernizar!) y, sobre todo, por lo costosísima que pueda ser una prevención ineficaz en el confort y en la calidad de vida presente y futura de todos los trabajadores y trabajadoras.

Si piensan que la formación y difusión de información junto con la integración de la labor preventiva en todos sus aspectos, es decir, de todas las disciplinas, es el camino que nos llevará a una cultura preventiva integral y que cuantas más personas elaboren, discutan y participen antes llegaremos a ese futuro que ya hemos empezado a dibujar.

¿Qué opinas de este artículo?