La llegada del Marketing Ergonómico

La llegada del Marketing Ergonómico

divendres, 11 març 2005

Toda disciplina científica, que se precie de estar al servicio del ser humano, debe evolucionar con el paso del tiempo intentando satisfacer las cambiantes necesidades humanas. Y en este contexto, obviamente, debemos ubicar a la Ergonomía.

Así de aquella Ergonomía (o en este caso concreto sería quizás mejor hablar de Ingeniería del Factor Humano) de la Segunda Guerra Mundial, donde la necesidad de construir maquinaria militar adaptada al operador fraguó su aparición; pasando por la corriente europeísta acerca del análisis de las características del individuo como base en la mejora de sus condiciones de trabajo, todas las Ergonomías, han ido también a su vez adaptándose a los distintos ciclos de vida del ser humano. 

Pero en este momento, ¿cuáles son las necesidades que caracterizan a la humanidad de los países considerados desarrollados? Si en un momento dado analizamos nuestras vidas, contemplamos la vorágine consumista y selectiva que nos absorbe. No solo adquirimos productos, sino que además seleccionamos aquellos que satisfacen en mayor medida nuestras expectativas. Esto obliga a las organizaciones a ofrecer objetos y servicios no solo excelentes sino más atractivos que los de la competencia. Y de atraer mercados, quienes saben mucho, son los responsables de Marketing.

Así pues, en la actualidad, estamos abocados a hablar del Marketing Ergonómico. Concepto aglutinador que deberíamos utilizar cuando diseñamos sistemas, productos o ambientes que tienen que ser aceptados por el mercado. ¿Si los puestos de trabajo, las herramientas, los programas informáticos, los hogares... se hacen para personas, no deberíamos como mínimo tenerlos en cuenta en la fase de diseño? 

Para poder afrontar este reto, es fundamental no caer en el error de pensar que el saber individual del ingeniero, del abogado, del psicólogo o del médico de turno nos permitirá alcanzar este objetivo. Ni mucho menos. Contar con la opinión de todos se antoja imprescindible. 

En una fecha tan señalada como el IV centenario de la aparición de uno de los grandes idealistas de nuestra historia, Don Quijote de la Mancha, ¿por qué no intentar hacer realidad nuestras propias aspiraciones como profesionales de la Ergonomía? ¿Por qué no podemos creer en escuelas de verdad pensadas para niños, en teléfonos móviles que puedan utilizar nuestros mayores, en mujeres y padres trabajadores que puedan disfrutar también de sus hijos, en actividades laborales que no dejen merma psíquica o física en quienes las realizan, en sistemas que minimicen los errores humanos...? Creo que realmente podemos llegar a ello y que además, el Marketing Ergonómico contribuiría a la obtención de este ideal laboral y social. 

Pero como decía antes esta creencia individual no es suficiente, así que desde Asturias, un grupo de gente “creyente” hemos puesto en marcha algo más que una organización empresarial, una ilusión colectiva: SINERCO. Esperamos compartir con ustedes en un futuro próximo este sueño. 

Gustavo Adolfo Rosal López

Gerente SINERCOIngeniero Industrial y Master de Ergonomía correo@gruposinerco.com

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