El incendio de una discoteca en Brasil deja al menos 232 muertos y más de un centenar de heridos

El incendio de una discoteca en Brasil deja al menos 232 muertos y más de un centenar de heridos

divendres, 1 febrer 2013

Aun no está aclarado el siniestro que dejó 5 muertos en el Madrid Arenas cuando ya estamos lamentando otra tragedia, en éste caso en Brasil también en un local de pública concurrencia con un aforo masivo de participantes y con una serie de irregularidades que se repiten como un canon en éste tipo de establecimientos:

  • Exceso de aforo
  • Materiales combustibles
  • Materiales empleados en producir mejoras acústicas sin la correspondiente ignifugación
  • Puertas de evacuación bloqueadas
  • Utilización de material pirotécnico de alto riesgo para éste tipo de actividades
  • Medidas de seguridad como la licencia de funcionamiento sin actualizar
  • Podríamos seguir con un listado de temas que se repiten como lo demuestran las últimas tragedias en Buenos Aires, Lima, Quito, New York, Caracas…

    En el caso de la de la discoteca Kiss en la ciudad brasileña de Santa María, escenario en la madrugada del domingo 27 de enero de un incendio, la licencia de funcionamiento estaba vencida

    desde agosto pasado, según informaron las autoridades. El incendio en la discoteca, que al parecer comenzó por el uso de artefactos pirotécnicos por parte de la banda que se presentaba en el escenario, dejó 232 muertos y 130 heridos según el último balance oficial divulgado a las pocas horas de la tragedia en una rueda de prensa por las autoridades Ni la capacidad del establecimiento ni el número de personas que se encontraban en la discoteca han sido establecidos por las autoridades. Como en otros casos, es un tema recurrente en éste tipo de tragedias: el exceso de aforo y la dificultad para probar este tipo de irregularidad

    Según los testigos, los guardias interceptaron la salida porque creyeron que se trataba de una riña. Intentaron evitar que el público aprovechara el tumulto para salir sin pagar

    por lo consumido.

    En la discoteca Kiss los clientes estaban al tope de aforo, llegando a ser un número entre 1800 y 2000 personas asistentes, según los guardias de seguridad.

    Según declaración de los supervivientes, el fuego se habría iniciado por una bengala lanzada por la banda de música que en esos momentos actuaba en el local

    Lamentablemente éste artículo no tiene nada de novedoso, una historia que se repite con cierta –trágica- periodicidad.

    ¿Hay solución para éste tipo de siniestro?

    ¿En manos de quienes esta la solución para evitar que este tipo de sucesos se repita?

    ¿En España se toman todas las medidas adecuadas frente a este tipo de actividad?

    ¿Hay un control por parte de las autoridades que actúe de forma preventiva de acuerdo a la normativa vigente?

    ¿Se sanciona con el rigor adecuado a la irregularidad cometida en los casos que existan incumplimientos?

    No hay duda que las escenas que nos llegan de ésta última tragedia nos deben llevar a una reflexión sobre todos estos temas para evitar que se repitan, y a una revisión más exhaustiva de la normativa y su cumplimiento, pero hay también una lección que debemos transmitir –en particular a los jóvenes- sobre el riesgo de asistir a locales donde puede detectarse con facilidad los excesos en el aforo.

    Evitar la permanencia en éste tipo de locales cuando se detecte que la circulación se hace excesivamente dificultosa y la prevención de cerciorarse de las vías de evacuación al margen de aquella por la cual se ha accedido.

    Personal del cuerpo de bomberos de la ciudad de Santa María tratan de sofocar las llamas del incendio en la discoteca Kiss

    Vecinos del local ayudan a evacuar cuerpos de cadáveres y heridos

    El caos reinaba en las proximidades del lugar de la tragedia

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