La Ergonomía: a veces un gran impulso
La Ergonomía: a veces un gran impulso
Desde la aparición de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en España el número de profesionales que se dedican a la ergonomía ha crecido de manera exponencial y la cantidad y calidad de las intervenciones ergonómicas en las empresas españolas está dando resultados espectaculares aunque, obviamente, siempre aparezcan voces críticas que resalten sólo los aspectos negativos (pocos programas de calidad para la formación en ergonomía, bisoñez de los ergónomos españoles,ambigüedad en las implantaciones de mejoras, etc...) y, aunque estas verdades sean en la mayoría de los casos anecdóticas, algunos las quieren aupar a la categoríade norma.
A cualquier observador neutral no le cabrála menor duda que las empresas españolas están hoy mejor posicionadas en el mercado internacional que hace una década y que parte de esta mejora cabe apuntarla en el bien hacer (buenas prácticas) de los ergónomos que ejercen su profesión en nuestro país, a veces supliendo las limitaciones formativas con fervor y dedicación encomiablesen la búsqueda de información.
Esto, por otro lado,ayuda a mejorar el conocimiento entre profesionales, el necesario intercambio de experiencias y la contrastación de técnicas aplicadas, factores imprescindibles para avanzar hacia una ergonomía de calidad al servicio de todos.
Con la convocatoria de este III Congreso de la Asociación Española de Ergonomía (AEE) y bajo el lema “La Ergonomía: campos de aplicación” se pretenden dos objetivos claves:
Elprimero y más obvio, es la necesidad de exponer ejemplos de buenas prácticas en la aplicación sistemática de la ergonomía en las organizaciones, debatir con colegas las intervenciones realizadas y ayudar, en la medida de lo posible, al incremento del acervo doctrinal de la ergonomía.
El segundo objetivo, aunque menos explícitoen la convocatoriaes común a todas las reuniones científicas:dar a conocer entre los profesionales que ejercen la ergonomía que no están solos, que en todo el territorio nacional existen otros expertos con problemas similares y que el crecimiento profesional muchas veces está ligado a la mejora de las relaciones personales con los colegas. Por eso con frecuencia resulta muy útilcompartir el conocimiento y las dudas con otros, que muchas vecesestán buscando precisamente lo que nosotros sabemos... y viceversa.
Todo ello en un tiempo en el que nuestra profesión afronta nuevos retos, retos que encontramos en nuestro quehacer cotidiano y que tienen que ver con las nuevas formas de organización del trabajo: outsourcing, subcontratación, fragmentación, temporalidad, organizaciones virtuales, etc. Factores que van a suponer un apasionante desafío en la base de nuestro trabajo como intérpretes del comportamiento y experiencia humanas.
Un buen momento y un maravilloso lugar para que los ergónomos españoles pongamos a trabajar nuestras experiencias será el próximo 14 de junio en el Principado de Asturias donde realizaremos este III Congreso Nacional de Ergonomía.
Estoy convencido que encontremos ese momento mágico que se da en todas las profesiones y que esta reunión servirá para impulsar de forma irrevocable y definitiva la implantación de la Ergonomía en las empresas españolas y, por contagio, en toda la sociedad.