Mark Zuckerberg confía en el metaverso para el futuro del teletrabajo, pero no está dispuesto a implementar dichas medidas en Meta y Facebook
Mark Zuckerberg confía en el metaverso para el futuro del teletrabajo, pero no está dispuesto a implementar dichas medidas en Meta y Facebook
Desde hace años, Mark Zuckerberg está centrado en explotar las posibilidades del metaverso. Tal es su ímpetu por exprimir las bondades de este sector tecnológico que ha invertido miles de millones de dólares en impulsar su visión, pero para su desgracia esto se ha traducido en pérdidas sustanciales que han llevado a Meta a apostar por otros derroteros. Sin embargo, aunque sus primeras tentativas no hayan salido como esperaba, ello no significa que Zuckerberg tenga pensado rendirse, y ya tiene en mente una opción para vender las virtudes del metaverso aunque él no le saque partido.
A raíz de la expansión de la COVID-19, muchas firmas tecnológicas apostaron por el teletrabajo para seguir ofreciendo a sus empleados la posibilidad de cumplir sus labores. Con la vuelta a la normalidad, muchas empresas han abogado por dejar atrás este modelo, razón por la que han instado a sus trabajadores a volver a las oficinas o a adoptar un sistema de trabajo híbrido. Entre estos se encuentra Meta, ya que el propio Zuckerberg cree que regresar a la sede de la compañía es lo ideal para “trabajar con más eficacia”. Pero, sorprendentemente, su pensamiento dista mucho de lo que quiere vender su empresa.
Zuckerberg apuesta por facilitar el teletrabajo pese a no creer en él
Como recogen los compañeros del portal francés JeuxVideo, Zuckerberg cree que gran parte de los entornos laborales del futuro están destinados a desarrollarse en el metaverso. De esta forma, Meta está realizando inversiones multimillonarias en crear entornos virtuales 3D inmersivos. Así, buscan fomentar oficinas privadas virtuales y espacios de coworking que, en el futuro, lleguen a sustituir a las videoconferencias tradicionales. Y, aunque Zuckerberg se ha mostrado reacio a que Meta adopte este tipo de modalidades, es uno de los principales defensores de esta visión.
En sus propias palabras, Zuckerberg busca “hacer más acogedor el teletrabajo”. Así, confía en que las virtudes del metaverso sean lo suficientemente atractivas como para despertar el interés de las empresas y, a la larga, aboguen por estos entornos para el desarrollo de su trabajo. Sin embargo, parece que Meta no entra en la ecuación, ya que el propio Zuckerberg ha insistido en que sus trabajadores tienen que regresar a las oficinas. De hecho, aquellos que no cumplan se enfrentan a sanciones y potenciales despidos, una situación diametralmente opuesta a esa experiencia inmersiva y revolucionaria que el creador de Meta está buscando implantar.