Las tres grandes implicaciones disruptivas de la IA en el mercado laboral

No es para menos, ya que la IA, como punto de inflexión instrumental de la actual cuarta era de la revolución industrial, si en algo se diferencia del resto de revoluciones industriales anteriores es que va a destruir más empleos de los que puede llegar a crear.

La del desajuste laboral provocado por la IA es una profecía de pronto autocumplimiento que viene anunciada desde hace menos de una década por diversos estudios sectoriales. Algunos de los más destacados, por órden cronológico, son los informes de McKinsey Global Institute (MGI) de 2017 con la participación de expertos del departamento de Economía de Oxford y el Banco Mundial, el estudio del Word Economic Forum de 2018, o, ya más recientemente, la declaración conjunta del Consejo de Comercio y Tecnología de EEUU y la Unión Europea en 2022 o el análisis de la entidad financiera Goldman Sachs en marzo de este año 2023, entre otros.

Coinciden en el pronóstico de la llegada de una ola disruptiva sobre el mercado laboral a diez años vista que afectará a alrededor de 300 millones de empleos en todo el mundo, en un contexto donde la mano de obra humana será sustituida por la IA. Una predicción altamente presumible a la luz de la lógica probabilística sobre tres vectores de análisis clave: la proyección de un vertiginoso e imparable desarrollo de la IA, la competitiva evolución productiva de bienes y consumo del mercado internacional en un entorno VUCA, y la crítica tendencia glocal codependiente entre PIB, demografía y estado de bienestar social.

Publicado en el número 185 de la revista, de mayo/junio de 2023.