Proyecto ExOsasun’: reducción de los TME en el entorno laboral mediante la investigación y desarrollo de exoesqueletos inteligentes y personalizables

Según datos de Osalan, Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales, los trastornos musculoesqueléticos (TME) son la enfermedad laboral más frecuente. Tanto es así que el 60% de las personas trabajadoras identifica los TME como su problema más grave. Sus principales consecuencias se centran en dolores físicos que pueden derivar en enfermedades crónicas, bajas laborales, etcétera. También tiene repercusiones económicas y laborales, ya que el gasto que origina su diagnóstico y tratamiento es el 40% del gasto por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en algunos países de la UE, y su impacto económico se sitúa alrededor del 2% del PIB.

La prevención es la base para el abordaje de los TME, y con ese objetivo nace el ‘Proyecto ExOsasun’. Enfocado en la reducción de los TME en el entorno laboral mediante la investigación y desarrollo de exoesqueletos inteligentes y personalizables, trata de reducir así el impacto que producen en los sectores más afectados por los sobreesfuerzos, como son el industrial y el sociosanitario. Puesto en marcha en 2020, está cofinanciado por el Gobierno Vasco a través del Programa de ayudas Hazitek y por la Comisión Europea (Feder).

Evaluación avanzada de exoesqueletos

Otra de las partes del proyecto es la validación de exoesqueletos, tanto en condiciones de laboratorio como en entorno real con un grupo de personas, de cara a obtener un conjunto de protocolos y metodologías para su evaluación avanzada. Para la consecución de este objetivo, se ha desarrollado un sistema de analítica avanzada de datos para detectar patrones de movimiento y activaciones musculares mediante el uso del exoesqueleto en las tareas identificadas de los casos de uso. Los datos se han recogido de todas las pruebas de laboratorio realizas con sensores de EMG, EEG y captura de movimiento.

Modelización

Asimismo, se ha desarrollado una herramienta capaz de modelizar de manera automática la ergonomía de cualquier puesto de trabajo, sin necesidad de realizar estudios pormenorizados por cada persona y puesto. Esta solución, basada en tecnologías de Inteligencia artificial y Big data, ayudará a prevenir las lesiones musculoesqueléticas, cuyo impacto económico por gastos sanitarios y bajas laborales alcanza actualmente el 2% del PIB.

Para ello, se parte de información capturada en tiempo real del propio profesional, como por ejemplo datos cinemáticos,  patrones de activación muscular, etcétera. Esta información se recoge tanto con exoesqueleto como sin exoesqueleto. También se pueden capturar, si el puesto así lo exige, datos del propio entorno de la persona, como la fuerza de reacción al suelo.

Con toda esta información y mediante conocimiento explícito provisto por una persona experta en ergonomía, así como conocimiento inferido automáticamente por el sistema, Ibermática busca determinar situaciones que supongan una carga que pueda desembocar en el corto, medio e incluso largo plazo en una lesión.

Las empresas que forman parte del proyecto, liderado por Clínica IMQ Zorrotzaurre (Grupo IMQ), son Ibermática, Gestamp, Gogoa Mobility Robots, Ludus VR, STT Ingeniería, Sistemas y Zermik y Tecnalia, ésta última perteneciente a la RVCTI. Además, el proyecto cuenta con el asesoramiento externo de Osalan, INSST, Mutualia y PESI (Plataforma Tecnológica Española de Seguridad Industrial).

Fuente: Interempresas