Detenido un empresario que obligaba a trabajar 26 horas seguidas
Detenido un empresario que obligaba a trabajar 26 horas seguidas
La Policía Nacional ha detenido a un empresario en Zamudio, País Vasco, por explotar laboralmente a sus trabajadores y obligarlos a hacer jornadas de hasta 26 horas, trabajando de siete de la mañana a las nueve de la mañana del día siguiente, algo que el acusado llamaba «maratón», según ha informado la Dirección General de la Policía.
Según los investigadores, obligaba a unos inmigrantes irregulares a trabajar en unas condiciones que rozan la semi esclavitud. Un dato: cada cierto tiempo su jefe les forzaba a hacer una «maratón» en la fábrica, dedicada al envase y manipulación de alimentos.
Fueron las propias víctimas las que acudieron una mañana a la comisaría que la Policía Nacional tiene en el bilbaíno barrio de Indautxu. Querían denunciar la situación en la que se encontraban y lo que estaba pasando en la planta, en la que manejaban sobre todo ajos y cebollas.
Explicaron que su jefe, de nacionalidad española, se aprovechaba de ellos y de su situación administrativa irregular. No tenían permiso de residencia y tampoco contrato de trabajo. Les pagaba 5 euros por hora «efectiva» de trabajo. El empresario -según relataron ellos mismos en la denuncia- también les decía que no dieran a los servicios médicos ni un dato de la empresa cuando sufrían algún accidente laboral. Lo más grave eran las jornadas interminables de 26 horas seguidas, con sólo una pausa de 60 minutos para comer el bocadillo. Pasaban toda la noche encerrados en la planta, ubicada en el Polígono Industrial Ugaldeguren, en Zamudio.
Los investigadores de la Policía hicieron algunas comprobaciones y dieron veracidad al testimonio de las víctimas. En este sentido, para evitar posibles represalias, les concedieron el carácter de testigos protegidos. Entre otras cosas, esta categoría implica que en el atestado no se incluye ningún dato personal de los denunciantes.
Días después se organizó una operación conjunta del Grupo 1 de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras y de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Bizkaia.
Inspección en la planta
Se presentaron en la fábrica de Ajos y Cebollas Txorierri, en Zamudio. Hicieron una inspección e identificaron en las instalaciones a ocho trabajadores. Cuatro de ellos carecían de permiso de residencia y de contrato de trabajo. La Policía detuvo allí mismo al empresario. Quedó en libertad tras prestar declaración en comisaría y ser advertido de que deberá presentarse ante el juzgado de instrucción que investigue lo ocurrido. Se le acusa de un delito contra los derechos de los trabajadores. Además, el arrestado se enfrenta a una posible sanción económica de más de 70.000 euros por infringir la legislación en materia laboral y de seguridad social.
Fuente: El comercio