Herramientas para la gestión del riesgo químico
Herramientas para la gestión del riesgo químico
La utilización de sustancias químicas avanza con rapidez y con ella la necesidad de facilitar a las empresas herramientas que les ayuden a gestionar los riesgos relacionados con la presencia de agentes químicos peligrosos en los lugares de trabajo.
Desde hace más de veinte años, acompañando a las estrategias cuantitativas de medición, han ido apareciendo otras metodologías cualitativas que pueden ayudar a dicha gestión. Estas últimas pueden proporcionar información sobre las medidas de control que son necesarias o si las ya existentes son adecuadas o no. De manera general, estos métodos cualitativos funcionan con una matriz en la que se combinan las variables de peligro (se distribuye en niveles o bandas atendiendo a las distintas clases de peligro) y la exposición potencial (también distribuida en niveles o bandas atendiendo a varios determinantes de exposición) para llegar así a un nivel de riesgo potencial. Algunas de estas metodologías incorporan las medidas de control como determinantes de la exposición y otras aconsejan las medidas técnicas de control en función del nivel de riesgo obtenido.
Parece haber poca variación en cuanto a la información utilizada para establecer las bandas de peligro, sin embargo, hay mayor variabilidad en los parámetros empleados en la determinación de la exposición.
Los métodos desarrollados tienen como objetivo facilitar a las empresas la gestión de los riesgos derivados de agentes químicos. Por tanto, el primer paso es encontrar la información sobre los peligros que estos suponen y para ello se emplea como punto de partida la información disponible en las fichas de datos de seguridad y sus correspondientes etiquetas. A priori es fácil disponer de esta información. Sin embargo, los determinantes de la exposición considerados pueden variar mucho de unas herramientas a otras, dificultando en algunos casos su utilización.
La modelización matemática trabaja sobre la estimación de la exposición y hay numerosos modelos desarrollados en función de los parámetros considerados como determinantes de la exposición. En este campo, el Reglamento REACH ha promovido su empleo, desarrollo y difusión, al imponer a los fabricantes e importadores, en los casos en los que sea de aplicación, el cálculo de la estimación de la exposición en las condiciones en las que corresponda, combinándolo o no con datos de mediciones.
Este documento, elaborado por un equipo de técnicos (y algún que otro ex-técnico) del INSHT (ahora INSSBT) coordinados por Ruth Jiménez Saavedra, describe, de manera general, algunos de los métodos más frecuentes o comunes que se encuentran en la literatura, los modelos que han evolucionado con el Reglamento REACH, variables consideradas en cada uno, aplicabilidad, mecanismo básico de funcionamiento, ventajas y limitaciones y otras consideraciones a tener en cuenta cuando se plantee el uso de estas estrategias. El objetivo del mismo consiste en facilitar la selección, uso y combinación de estas herramientas aportando información para mejorar, así, la gestión de los riesgos relacionados con la presencia y uso de agentes químicos en los centros de trabajo. El propósito único de todas estas herramientas reside en proteger la salud de los trabajadores.
Adjuntamos el texto completo del documento.