Un robot opera sin doctor
Un robot opera sin doctor
Un nuevo dispositivo coloca a la cirugía un paso más cerca del ámbito de la automoción y las máquinas inteligentes. Por primera vez, un robot autónomo supervisado puede efectuar (con éxito) una cirugía en tejidos blandos.
Este "autómata" superó a los cirujanos expertos, solos y asistidos con diversas técnicas robóticas, en una cirugía intestinal abierta que se llevó a cabo en cerdos.
Los artífices de este nuevo robot consideran que al eliminar la intervención humana de la ecuación quirúrgica, se reducen las complicaciones y mejora la seguridad y eficacia de las intervenciones de tejidos blandos.
En la actualidad, la cirugía asistida por robot se basa en el control manual del médico, por lo que los resultados pueden variar dependiendo de la formación y la experiencia de cada individuo.
Los esfuerzos en la automatización de la cirugía han avanzado enfocados en los tejidos duros, tales como el corte de hueso, pero han resultado un desafío para los tejidos blandos, maleables y movibles, y, por tanto, de resultados más impredecibles.
Un grupo de investigadores, coordinado por Peter Kim y Alex Krieger, del Sistema Nacional de Salud Infantil, en Washington, ha diseñado y programado el robot autónomo de tejidos inteligente (STAR) para realizar tareas quirúrgicas complejas. Bajo ese nombre lo presentan en un trabajo que publica Science Translational Medicine, con Azad Shademan, como primer firmante.
Equipado con un brazo robótico y unas herramientas quirúrgicas, STAR combina las tecnologías de imagen avanzadas y los marcadores fluorescentes para navegar y adaptarse a las complejidades de los tejidos blandos.
Los investigadores probaron el robot frente a la cirugía manual "humana", por parte de cirujanos expertos, y también la enfrentaron a la laparoscopia y a la cirugía asistida por robot con el sistema quirúrgico Da Vinci. Bajo supervisión, STAR demostró ser superior a todas esas aproximaciones en la sutura y en la anastomosis intestinal, tanto ex vivo como in vivo en cerdos. Los animales sobrevivieron a la operación sin complicaciones.
Los investigadores opinan que con un mayor desarrollo la cirugía robótica autónoma podría alejar al error humano fuera del quirófano, mejorar la atención de los pacientes sometidos a cirugía y la extirpación de un eventual tumor, entre otras intervenciones de tejidos blandos.
Fuente: Diario Médico