El conflicto laboral de los estibadores afecta ya al Puerto de Barcelona

El conflicto laboral de los estibadores afecta ya al Puerto de Barcelona

El conflicto laboral en los puertos españoles empieza a notarse. Incluso antes de convocarse oficialmente una huelga (inicialmente prevista para el 20, 22 y 24 de febrero) contra el nuevo marco legal del Gobierno, las tareas de carga y descarga en el Puerto de Barcelona empiezan a sufrir este miércoles las consecuencias al realizarse a un ritmo más lento de lo previsto, informa TV-3. Los estibadores se oponen a la reforma que ultima el Ministerio de Fomento para romper el monopolio que este colectivo tiene del sector encargado de cargar y descargar los barcos, esto es, de gestionar las mercancías que entran y salen de España por mar.
15 Febrero 2017

La policía portuaria intentaba por la mañana acelerar el tránsito de camiones en las instalaciones, aunque el ritmo de trabajo de carga y descarga se ha visto afectado por algunas asambleas. Fuentes del Puerto reconocieron que si los procesos de estiba se ralentizan, el tráfico marítimo podría llegar a verse afectado.

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se ha aliado con la denominada Plataforma de Inversores en Puertos Españoles (PIPE), el ‘lobby’ que agrupa a las principales concesionarias de terminales (Noatum, OHL Concesiones, Algeposa, Boluda o Bergé) en el objtetivo de liberalizar el sistema actual de contratación de trabajadores para la carga y descarga de barcos. Esa medida tendría un efecto postivo sobre la economía española de hasta 2.400 millones de euros, el 0,22% del producto interior bruto. El conflicto se ha desatado, ya que esa reforma también apunta a la posible rebaja del sueldo de los estibadores del 60%, según algunas previsiones.

El principal sindicato del sector, la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, y el resto de formaciones con representación entre este colectivo (CCOO, CIG y CGT) están dispuestos a plantear una férrea oposición al nuevo marco legal y al "destrozo laboral" que supondría. Acusan al Gobierno de querer dirigir los beneficios del sector a las empresas y no a los trabajadores.

BUENOS RESULTADOS

En unos momentos de buenos resultados de los puertos españoles, con tasas de rentabilidad del 20%, el plan del Gobierno quiere aprovechar para desregular la actividad y abaratar los costes de funcionamiento, entre los que los de personal se han situado en el disparadero. Menos costes salariales y más flexibilidad son las premisas de un futuro que choca frontalmente con la situación actual, de salarios altos y elevada especialización.

Un informe de la consultora PWC llegó a cuantificar la rebaja salarial posible en un escenario de liberalización en las contrataciones, cifrándola en un 60%. Esa rebaja supondría considerar al estibador un operario semiespecializado equivalente a los existentes en el sector de la construcción, con salarios inferiores a los 30.000 euros anuales con condiciones de peligrosidad equivalentes.

DESPIDO GENERAL

La llama del conflicto laboral se ha encendido ya en los 46 puertos españoles, que según los sindicatos se convertiría en el despido de los actuales trabajadores, tras un periodo de paz social y eficiencia que ha contribuido a conseguir los buenos resultados actuales tras los años de crisis. El colectivo de estibadores en España lo componen del orden de 6.000 trabajadores, actualmente concentrados en las denominadas sociedades de gestión de trabajadores portuarios (Sagep). El Ministerio prevé articular un plazo de tres años para que paulatinamente desaparezcan estas sociedades y las empresas estibadoras puedan contratar libremente a sus trabajadores.

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