Los sindicatos denuncian en un nuevo informe las prácticas medievales de Samsung

Los sindicatos denuncian en un nuevo informe las prácticas medievales de Samsung

La nueva investigación revela cómo el alcance mundial de la implacable búsqueda de beneficios de Samsung afecta a la vida cotidiana de sus trabajadores.
17 Noviembre 2016

Los trabajadores y las trabajadoras de Samsung han mostrado las condiciones de trabajo que existen en las cadenas de suministro de la multinacional. La Confederación Sindical Internacional (CSI) e IndustriALL publican un nuevo informe, Samsung – Tecnología moderna, condiciones medievales.

“Desde negar justicia a las familias de los antiguos trabajadores que fallecieron de cánceres provocados por lugares de trabajo inseguros, hasta evadir impuestos y participar en carteles de fijación de precios, se constata un elemento constante: la cultura corporativa de Samsung está orientada implacablemente a la maximización de sus beneficios en detrimento de la vida cotidiana de sus trabajadores”, observó Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI.

La CSI ha instado a Samsung a poner fin a la explotación y abuso de sus trabajadores y trabajadoras y abolir su política antisindical. Un nuevo video: El secreto de Samsung cuenta la historia de una familia de sindicalistas atrapada por la política antisindical de Samsung, la cual afecta a toda la industria electrónica de Asia.

“Cuando los trabajadores de los contratistas que forman parte de la cadena de suministro de Samsung se afilian a un sindicato, es como si cayera una guillotina sobre su contrato. Samsung utiliza su poder e influencia para intervenir sobre sus proveedores. De arriba a abajo de su cadena de suministro, Samsung prohíbe la formación de sindicatos con la amenaza de cancelar los contratos en cualquiera de las empresas donde los trabajadores se organicen”, comentó Sharan Burrow.

Samsung SDI, la empresa que fabrica las baterías propensas a incendiarse del Samsung Galaxy Note 7, redujo su mano de obra en un 35 por ciento y ha suprimido toda organización sindical desde hace más de diez años. Al igual que en otras empresas de Samsung, los trabajadores/as temen señalar los problemas existentes en la línea de producción.

“Cuando las compañías aéreas prohíben el uso del teléfono Note 7 de Samsung durante el vuelo, los pasajeros resienten el mismo temor que muchos trabajadores y trabajadoras de Samsung experimentan todos los días por su propia salud y seguridad”, señaló Burrow.

El grupo que se ocupa de la seguridad de los trabajadores en la industria de los semiconductores, conocido como SHARPS (Supporters for the Health and Rights of People in the Semi-Conductor Industry) está planeando una manifestación en las oficinas centrales de Samsung en Seúl, el 7 de octubre, cuando se conmemora Jornada Mundial por el Trabajo Decente

En tanto que una de las empresas más grandes y poderosas del mundo, las empresas filiales de Samsung producen alrededor de una quinta parte de las exportaciones totales de Corea del Sur. Samsung Electronics registró individualmente ingresos anuales superiores a los 183 mil millones de USD en 2012, cifra que supera el PIB de países como Camboya y Honduras.

El informe también arroja luz sobre los negocios turbios de los conglomerados coreanos “chaebol”, que dominan la toma de decisiones políticas en un país que suele encarcelar a los líderes sindicales simplemente por defender los derechos de los trabajadores y de las trabajadoras.

“La avaricia corporativa, la intimidación de las empresas no puede tolerarse. Ya es hora de que un Estado de Derecho a escala mundial garantice la globalización con condiciones de trabajo justas, con derechos, salarios mínimos que permitan a las personas vivir con dignidad, así como un trabajo seguro y protección social”, afirmó Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL.

Por su parte, Sharan Burrow, añadió: “Empezando con Samsung, nos hemos dado a la tarea de exponer la avaricia corporativa y el hecho de que las corporaciones más grandes del mundo se niegan a asumir su responsabilidad en la explotación y violaciones presentes en sus cadenas de suministro: destrucción de sindicatos, salarios de pobreza, un trabajo inseguro y peligroso, horas extras forzosas, trabajo informal y una forma de esclavitud moderna.

“No nos vamos a quedar allí: vamos a mantener la presión para exigir una reforma y un Estado de Derecho, vamos a colaborar con el capital de los fondos de pensiones de los trabajadores en relación con sus estrategias de inversión y nos mantendremos al lado de los trabajadores y las trabajadoras de todos los lugares del mundo donde exijan un Estado de Derecho. Vamos a poner un alto a la codicia corporativa”.

Adjuntamos el informe de la CSI e IndustriALL: “ Samsung – Tecnología moderna, condiciones medievales” en su texto completo en inglés.

Fuente: CSI e Industriall

 

¿Qué opinas de este artículo?