El operario que murió al caer por una claraboya en la UPV no tenía contrato ni era autónomo

El operario que murió al caer por una claraboya en la UPV no tenía contrato ni era autónomo

CC OO abre la vía penal contra la empresa que le encargó el trabajo "sin proporcionarle medidas de seguridad"
28 Junio 2014

El pasado día 22 de mayo les informamos del accidente en el que un trabajador perdió la vida al caer a través de una claraboya en la Universidad del País Vasco. El accidente ha sacado a la luz la precariedad laboral en la que se encontraba, injustificable en cualquier caso, pero más si cabe cuando prestaba un servicio para una institución pública como la UPV. Porque Tomás C. L. -el operario de 52 años que murió el 20 de mayo al caer por una claraboya del tejado de la biblioteca en el campus de Leioa-, no tenía ningún tipo de contrato de trabajo, ni era autónomo, a pesar de ser la tercera subcontrata de la obra de impermeabilización de la cubierta.

La denuncia la ha hecho el sindicato CC OO, quien confirmó que el trabajador desempeñaba sus tareas bajo las ordenes de la empresa Lan Ondo Multiservicios S. L., que a su vez había recibido el encargo por parte de la firma Gaimaz, a la que la UPV adjudicó originariamente la obra. CC OO de Euskadi ha iniciado las acciones legales para que la familia del fallecido reciba las compensaciones oportunas y entiende que la responsabilidad última es de Lan Ondo Multiservicios. El sindicato va a emprender también la vía penal contra los administradores de esta empresa, puesto que considera «extremadamente grave» obligar a subir a 25 metros de altura a un trabajador al que no se ha contratado y al que no se le ha proporcionado ninguna medida de seguridad.

Por su parte, el sindicato ELA ha añadido al hecho de que no tuviera contrato que «se habían instalado unos sistemas de anclaje que no reunían las garantías necesarias ni estaban certificados ni homologados». Tanto esta central como CC OO consideran a la universidad como la responsable de garantizar todas las medidas de seguridad de los trabajadores que acceden al recinto.

Tras estas acusaciones, la UPV volvió a insistir en que «la responsabilidad primera y última» de lo sucedido corresponde «a la empresa contratista y a las eventuales subcontratas». Fuentes del Rectorado aseguraron que la institución «comprobó en todo momento las condiciones en que accedieron los trabajadores de la empresa contratista Gaimaz», en cuya actuación aprecia, por otra parte, «la vulneración de determinadas exigencias legales en lo que se refiere a la subcontratación de la obra a terceros». EH Bildu ya ha pedido la comparecencia del rector, Iñaki Goirizelaia, en el Parlamento para que aclare todos estos extremos.

Fuente: El Correo

¿Qué opinas de este artículo?