Importancia de la seguridad y de la prevención en operaciones de control de plagas y desinfección
Importancia de la seguridad y de la prevención en operaciones de control de plagas y desinfección
La preocupación y la sensibilidad de la sociedad en relación con la seguridad y la prevención de riesgos, generan en el presente una creciente demanda de servicios altamente especializados en el ámbito de la Higiene en edificios e instalaciones de diversa índole y condición. Las actividades enfocadas a satisfacer esta demanda se basan en sistemas profesionales de Gestión Integrada de Plagas y Desinfección, cuyos principios de desempeño en la práctica han de ser llevados a cabo aplicando las técnicas y procedimientos idóneos de control, respetando simultáneamente el ámbito legislativo y las normas que los orientan hacia la obtención de las máximas cotas de eficacia en este terreno.
FUNDAMENTOS TÉCNICOS DE LA GESTIÓN DE LA HIGIENE EN LOS EDIFICIOS
Los agentes o factores de distorsión de las condiciones de higiene y sanidad en los edificios pueden ser agrupados en dos grandes categorías:
• La incidencia de plagas, (insectos, roedores), y microorganismos (hongos, bacterias, patógenos).
• La utilización irresponsable e indiscriminada de métodos de control mediante productos químicos, tales como insecticidas, biocidas o desinfectantes.
Los métodos de control de plagas y desinfección son variados, pero a efectos prácticos pueden ser clasificados en seis grupos generales:
• Implementación de barreras físicas y mecánicas, basadas fundamentalmente en el adecuado diseño y construcción del edificio.
• Ordenamiento del medio, aplicando oportunas medidas de exclusión y adaptación del entorno de influencia.
• Adopción de medidas sistemáticas en materia de higiene, saneamiento y limpieza.
• Empleo de métodos biológicos.
• Empleo de métodos químicos: insecticidas, rodenticidas, desinfectantes.
• Implantación de estrategias de educación sanitaria destinadas a usuarios, personas y empresas externas responsables del mantenimiento higiénico sanitario de las instalaciones.
Para prevenir, corregir y controlar la presencia de factores de distorsión mediante el diseño de las opciones más adecuadas, el camino lógico a la hora de desarrollar las actuaciones pertinentes en este ámbito se ha de iniciar mediante el diagnóstico detallado de la situación. Solo desde esta perspectiva es posible diseñar objetivamente un protocolo y un plan de actuación conducente a avalar las mejores opciones en materias relacionadas con la higiene y la sanidad ambiental. La rigurosa auditoría de posibles factores de riesgo asociados a las condiciones higiénico sanitarias, así como el diseño objetivo de alternativas de control y prevención, constituyen la estrategia más razonable a tener en cuenta a la hora de diseñar los protocolos que garanticen a los usuarios del espacio interior las óptimas condiciones de seguridad y confort.
El diagnóstico de las condiciones de higiene en edificios e instalaciones permite elaborar, en función de los resultados de un estudio previo, los programas de actuaciones relacionados con las medidas preventivas o correctoras recomendables en tal sentido. Solo partir de esta base toman forma con objetividad los programas de mantenimiento Higiénico Sanitario, enfocados con criterios de optimización integral de la seguridad y de la higiene, que son los que en definitiva permitirán adaptar las soluciones a las condiciones y necesidades concretas planteadas por cada caso, a la vez que garantizarán por esta vía las máximas cotas de eficacia en los resultados.
LA SEGURIDAD Y LA PREVENCIÓN EN LA GESTIÓN DE LA HIGIENE EN LOS EDIFICIOS
El control de plagas y la desinfección de edificios e instalaciones diversas implican, en mayor o menor medida, utilizar equipos y materiales diversos, además de vigilar rigurosamente aspectos como el almacenaje, la manipulación y la utilización de productos químicos y biocidas de diferente naturaleza. Estas funciones son habitualmente llevadas a cabo por personas y empresas responsables de funciones de mantenimiento y conservación.
Independientemente de la normativa aplicable a cada caso específico, así como los requisitos que imponen los procedimientos operativos en materia de seguridad y de prevención de riesgos, la práctica de dicha gestión implica asumir con rigor ciertas medidas de seguridad en cinco aspectos básicos relacionados con este tipo de trabajo:
• Utilización de Productos Químicos
• Almacenaje de Productos Químicos
• Protección Personal
• Fichas de Seguridad de los productos químicos
• Etiquetas de los envases de productos químicos
Utilización de Productos Químicos
El ámbito jurídico, así como la normativa aplicable en materia de control de plagas y desinfección, prescriben y aconsejan minimizar el uso de productos químicos en la ejecución de actuaciones de esta naturaleza, promoviendo en cambio el empleo de métodos y sistemas de control alternativo de tipo físico y mecánico.
No obstante, el control químico continúa siendo una opción ineludible en ciertos casos justificados, por lo cual, para evitar accidentes durante el uso de productos peligrosos y nocivos, es imprescindible cumplir y respetar los principios de prevención y seguridad detallados a continuación.
• Disponer de máxima información sobre los productos a utilizar.
• No mezclar productos entre si.
• No cambiarlos de sus envases originales.
• No reutilizar los envases para otros productos.
• No utilizar productos sin etiquetas por falta o deterioro de las mismas.
• No fumar, beber o comer durante la manipulación y utilización de los productos.
• Lavarse las manos con agua abundante después de manipular los productos.
• No verter agua sobre los productos. Verter los productos sobre el agua solamente si es necesario diluirlos para su dosificación.
• Intentar no manipular los productos, e inyectarlos directamente a los depósitos o equipos de aplicación con los apropiados dosificadores.
La excesiva confianza en el uso de los productos químicos conduce siempre a accidentes
Almacenaje de Productos Químicos
La recepción y el almacenaje de productos químicos deberán ser realizados siempre por el personal de mantenimiento de las instalaciones, adecuadamente preparado y formado a tales efectos.
El lugar destinado a almacenaje de productos químicos habrá de cumplir como mínimo con los siguientes requisitos:
• Ser de fácil acceso.
• Estar situado fuera del alcance de los usuarios y del público en general.
• Estar ordenado, separando los productos de acuerdo con su composición y nivel de riesgo.
• Permitir gestionar la rotación de los productos de acuerdo a su tiempo de almacenaje (nuevos, antiguos, estado de conservación).
• Aplicar y mantener un sistema de etiquetado e identificación del almacén y de los envases rápidamente visible.
• Contar con compartimentos estancos para reactivos líquidos envasados en contenedores de gran volumen.
• Contar con una instalación de ventilación forzada.
• Prever medidas de seguridad y contingencia para corregir posibles accidentes o fugas.
Fichas de seguridad de los productos químicos
Los responsables de la manipulación y utilización de productos químicos nocivos y peligrosos deberán disponer en todo momento de las correspondientes fichas de seguridad, con el fin de poder hacer frente con objetividad y rapidez a cualquier incidencia, accidente o situación de riesgo que requiera la adopción de medidas de emergencia.
La ficha de seguridad incluirá todos los puntos a tener en cuenta a la hora de manipular y utilizar el correspondiente producto químico.
Las fichas de seguridad de los productos deberán estar disponibles para todos los responsables del almacenaje, manipulación y utilización de los mismos, tanto a nivel de despacho y almacén, como en los vehículos utilizados para el transporte y la prestación de los correspondientes servicios.
Las fichas de seguridad de los productos químicos peligrosos y nocivos las deberá suministrar el fabricante, y deberán ponerse a disposición de los titulares y responsables de las dependencias objeto de su aplicación, al iniciar la prestación del servicio de control de plagas o desinfección.
Etiquetas de los envases de productos químicos
El personal que manipula y utiliza productos químicos nocivos y peligrosos está obligado a leer las instrucciones que contiene la etiqueta del correspondiente preparado, familiarizándose en detalle con sus características, condiciones de uso, dosis, plazos de seguridad y medidas de seguridad y prevención.
En este sentido, es preciso volver a destacar que la excesiva confianza en el uso de los productos químicos conduce siempre a accidentes, lo cual a la vez es consecuencia directa de actuar de manera rutinaria y precipitada, y de enfocar el trabajo careciendo del adecuado rigor en materia de programación y organización.
Protección Personal – Elementos de Protección Personal (EPI)
El personal que utiliza y manipula, así como las empresas que poseen locales de almacenaje de productos químicos nocivos y peligrosos destinados a control de plagas y desinfección en general, han de disponer y utilizar, como mínimo, los siguientes elementos de protección personal:
• Máscara de seguridad de protección respiratoria y facial
• Delantal de goma o mono protector
• Guantes de protección
• Botas
• Gafas protectoras
• Vestimenta y calzado de protección
• Material de primeros auxilios
ÁMBITO JURÍDICO Y NORMATIVA APLICABLE A DESINFECCIÓN Y CONTROL DE PLAGAS
Independientemente de los requisitos establecidos por las diferentes Comunidades Autonómicas, los protocolos de higienización, control de plagas y desinfección se han de ajustar como mínimo a las leyes, decretos y normas generales detalladas a continuación:
• Ley 31/1995 - Prevención de Riesgos Laborales.
• Real Decreto 486/1997 - Disposiciones mínimas de Seguridad y Salud en los lugares de trabajo.
• Inscripción de los productos biocidas utilizados en control de plagas y desinfección en el Registro de la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad y Consumo.
• Orden 08/03/94 del Ministerio de la Presidencia – Normativa reguladora de la homologación de cursos para realizar tratamientos con Plaguicidas. Modificada por Orden PRE/2922/2005.
• Real Decreto 3349/83 – Reglamentación Técnico-Sanitaria (RTS) para la fabricación, comercialización y utilización de plaguicidas. Modificaciones posteriores en R.D. 162/1991 y R.D. 443/1994.
• Orden del 24/02/1993 – Inscripción y funcionamiento del Registro de Establecimientos y Servicios plaguicidas.
• Norma UNE 171210 – Buenas prácticas en planes de Control de Plagas (DDD).