Le Monde revela las conexiones con la industria de los expertos supuestamente independientes que asesoran a la Comisión Europea en la fijación de valores límite

Según una investigación publicada el 24 de febrero en el diario francés Le Monde (que adjuntamos en su texto completo), expertos con vínculos industriales dominan un comité que asesora a la Comisión Europea sobre la adopción de límites de exposición profesional.

Los resultados de la investigación revelan que 15 de los 22 miembros del Comité Científico de Valores de Exposición Ocupacional (SCOEL) tienen vínculos con empresas de sectores que podrían verse afectados por los planes de la Comisión de adoptar nuevos límites de exposición profesional (OEL) para determinados sustancias en el marco de la revisión en curso de la Directiva relativa a la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes carcinógenos o mutágenos en el trabajo.

Stéphane Horel, periodista conocida por sus investigaciones sobre la influencia ejercida por los grupos de presión sobre las instituciones europeas, pudo establecer vínculos entre 15 de los expertos de SCOEL y empresas (BASF, Shell y Monsanto entre otras) u organizaciones representativas de determinadas industrias la industria de las fibras minerales).

El hecho de que algunos miembros del Comité tengan vínculos tan estrechos con la industria suscita preocupación por la credibilidad de las OEL propuestas por la Comisión Europea. Muchos observadores a nivel sindical o de organizaciones no gubernamentales creen que las recientes propuestas de la Comisión a este respecto no garantizarán una protección adecuada de los trabajadores expuestos a estas sustancias, ya que los OEL sugeridos para una serie de carcinógenos, en particular el cromo hexavalente, que ya se aplican en varios Estados miembros.

Laurent Vogel, investigador de la ETUI, fue citado en el artículo de Le Monde diciendo: "Las OEL excesivamente altas son un atajo para el desastre. Los trabajadores creen erróneamente que están protegidos, mientras que en la práctica tales OEL equivalen a entregar a las empresas una licencia para matar.

Fuente. ETUI